Iglesias ahuyentó al 40% de los votantes de IU

EL MUNDO 08/11/16

· Cuatro de cada 10 electores de Garzón el 20-D no apoyaron a Unidos Podemos en junio

Una coalición concebida para redoblar fuerzas, pero que se quedó a medio gas. La suma de Podemos e IU no convenció en los términos que imaginaron Pablo Iglesias y Alberto Garzón al alumbrar Unidos Podemos. No lo hizo entre el electorado en general –la coalición se quedó lejos de superar al PSOE–, pero tampoco entre sus fieles: un 40% de quienes habían escogido la papeleta de IU en las elecciones de diciembre de 2015 no dieron su apoyo a Unidos Podemos seis meses más tarde, en junio. Esto es, cuatro de cada 10 votantes comunistas fueron ahuyentados por el liderazgo de Iglesias.

Según los datos del CIS postelectoral, conocidos ayer, sólo el 60,3% de quienes afirman haber votado a IU en diciembre dieron su respaldo a Unidos Podemos en la cita posterior del 26 de junio. Y quienes confiaron en el partido surgido de la coalición, en todo caso, no lo hicieron atraídos por el liderazgo de Iglesias: apenas el 7,3% de los votantes de IU argumenta su voto a Unidos Podemos por el candidato a la Presidencia del Gobierno. El argumento para seguir el viaje de Garzón es que era el partido que mejor representaba sus ideas. Un 41,7% expone esta idea. Y lo que no movilizó ni un solo voto de IU fue la labor parlamentaria de Podemos e Iglesias en la pasada legislatura fallida: únicamente el 1% esgrime como argumento su actuación durante ese periodo.

Estos datos suponen que el 40% de los votantes de IU en diciembre escogieron nuevas opciones en junio. ¿Cuáles fueron? El 16,7% prefirió apostar por el PSOE ante la unión con Podemos del partido liderado por Alberto Garzón; el 8% directamente no votó, se quedó en casa; y el 4,6% eligió la papeleta naranja de Ciudadanos, pese a que Garzón siempre ha defendido que sus postulados son incompatibles con los que defiende el partido de Rivera.

Los datos publicados ayer por el CIS permiten observar los trasvases de votos producidos en las últimas elecciones generales en España. El más llamativo y cuantioso es el que se produjo de Ciudadanos hacia el PP. Un 15,4% de quienes afirman que eligieron al partido de Rivera en diciembre se cambiaron al PP en junio. Si el 20-D Ciudadanos obtuvo 3.500.541 votos, el 15,4% significa 539.083 papeletas. Más de medio millón de sufragios traspasaron la porosa frontera Ciudadanos/PP. ¿Se produjo un trasvase similar en el otro sentido? No. Sólo el 3,8% de los votantes del PP se pasaron a Ciudadanos el 26-J, lo que supone 274.198 personas.

Los expertos hablan de frontera porosa entre PP y C’s porque entre ambos está la principal duda que afrontan los indecisos que acuden a las urnas. En las elecciones de junio, el 16,1% de quienes dudaron a quién votar lo hicieron entre PP y Ciudadanos. Esta indecisión fue mucho mayor entre los votantes populares: un 62,7% dudó, frente al 32,4% de los que se decantaron por Rivera.

Volviendo al trasvase de votos entre el 20-D y el 26-J, una de las explicaciones a que Unidos Podemos no lograra el sorpasso al PSOE es que los votantes socialistas no fueron infieles con la papeleta morada. Pedro Sánchez logró retener al 77,3% de sus adeptos y sólo el 2,6% se marchó al partido de Pablo Iglesias. Es destacable que fue mayor la fuga de socialista a Ciudadanos: un 3,2%.

Por contra, los vasos comunicantes entre Unidos Podemos y el PSOE son más elevados. Un 6,3% se pasó al proyecto de Sánchez entre una cita electoral y la siguiente. Otro 2,7% apostó por Ciudadanos, mientras que del partido de Rivera al de Iglesias sólo se fugó el 1,3%.

Con todo, uno de los movimientos de voto más destacables se produjo en Cataluña. La antigua Convergéncia apenas pudo retener al 64,7% de su apoyo electoral, viendo cómo hasta un 12,9% se marchaba con ERC. Una muestra sintomática del cambio político que se vive en la comunidad.

Un dato esclarecedor para la agenda de los estrategas del PSOE es que su formación no es nada atractiva para los nuevos votantes. Sólo el 5,3% de los electores que cumplieron 18 años entre diciembre y junio escogió a los socialistas, el porcentaje más bajo de los cuatro grandes partidos. Por establecer una comparación directa: el PP atrajo al 13,2%.