Anabel Díez ,Juan José Mateo-El País 

El mantenimiento del 155 impide el apoyo del PNV y también se aleja el de Ciudadanos

Las piezas para que la legislatura eche a andar siguen sin encajar. El presidente del Gobierno ve alejarse la posibilidad de que Ciudadanos y el PNV sumen sus votos para aprobar los presupuestos de este año a pesar de que tiene previsto presentarlos el 23 de marzo. La negativa de los nacionalistas vascos a prestar este apoyo mientras Cataluña siga intervenida por el Gobierno central ha trastocado los planes de Mariano Rajoy. Este ha constatado que esta posición no es pasajera. El Gobierno apelará a los perjuicios que causará a muchos sectores sociales el rechazo a las cuentas de este año.

Los planes del Gobierno se han alterado de forma notable en las últimas semanas. Su previsión era que tras las elecciones de Cataluña del 21 de diciembre se hubiera producido un acuerdo entre las fuerzas nacionalistas catalanas para designar un presidente sin problemas con la justicia y que esto habría permitido levantar el artículo 155 de la Constitución. Este levantamiento habría desbloqueado, a su vez, los presupuestos del Estado, que se pretendía tenerlos encauzados en el mes de abril.

Hoy por hoy, con la Administración catalana intervenida, los peneuvistas no se sentarán a hablar, aseguraron ayer de forma tajante fuentes del PNV. Estos interlocutores negaron que haya negociaciones discretas ni de ningún tipo. “Con el 155 en vigor no habrá negociación sobre los presupuestos”, zanjaron ayer estos interlocutores.

Aun así Rajoy quiere presentar los presupuestos el día 23, por lo que incrementará sus peticiones, advertencias y avisos a quienes pueden hacer prosperar directa o indirectamente las cuentas, como ayer hizo en respuesta al senador del PDeCAT Josep Lluís Cleries en la sesión de control de la Cámara alta. Este le reprochó “la parálisis legislativa, la ausencia de presupuestos, así como del proyecto de financiación autonómica o una respuesta a las demandas sobre pensiones”.

En su respuesta Rajoy puso en evidencia que esa realidad que el senador nacionalista describía podía ser otra con la colaboración de las formaciones políticas soberanistas catalanas. “La inmensa mayoría de la gente quiere que haya una recuperación de la normalidad institucional, económica y social y eso pasa por formar gobierno en Cataluña”, dijo el presidente. Rajoy continuó: “Debemos terminar, algunos, con el espectáculo que están generando y pónganse de acuerdo, pero háganlo de acuerdo con las normas, respetando la ley. Y una vez que sean capaces, habrá diálogo”, señaló. “El autogobierno no nos lo dimos el conjunto de los españoles para utilizarlo como un instrumento de confrontación. Formen gobierno ya”, exclamó Rajoy.

El jefe de Gobierno hubiera querido tener ya todo preparado para poner fin a la intervención del Estado en Cataluña a través del 155, reconocen fuentes gubernamentales. Rajoy está más que apurado por esta situación pero tampoco el PNV tiene motivos para estar tranquilo, según la dirección nacional del PP. Si no hay presupuestos, el partido de Andoni Ortuzar se enfrenta al peligro de perder, por la falta de presupuestos, gran parte de lo pactado con el Gobierno en 2017, señalan fuentes populares.

Situación estancada

Con Ciudadanos la situación sigue estancada. No hay voluntad de prescindir de la senadora del PP Pilar Barreiro a no ser que el Tribunal Supremo mantenga la imputación y el partido de Albert Rivera pretende que no espere a esa decisión. La equiparación de los salarios entre policías está ya casi conseguida pero ahora añaden como condición el cumplimiento de otras medidas de su acuerdo de legislatura.

Todo lo que se puede hacer y está parado solo produce daño a muchos sectores sociales. Esto es otra línea argumental que utilizará el Gobierno, como ayer hizo Rajoy en respuesta a la senadora de Nueva Canarias María José López Santana. Esta explicó la pésima situación laboral de las camareras de piso (las kelly) y Rajoy aprovechó la pregunta para enmarcar su solución en los presupuestos aún por aprobar y enumeró en catálogo de propuestas para aliviar la situación de estas trabajadoras. El presidente antes que ningún otro compromiso comparecerá el miércoles próximo en el Congreso para debatir sobre pensiones. Para entonces ya habrá nombrado al sustituto de Luis de Guindos al frente del Ministerio de Economía.