La subida del PP en otras elecciones no resolvería el bloqueo político

ABC 11/09/16

· Los populares lograrían 142 escaños, el PSOE volvería a caer en las urnas y perdería cuatro diputados. Podemos y C´s también retroceden

El posible pacto con el PNV El PNV lograría seis escaños si se repiten los comicios, uno más que en la actualidad, y su apoyo sería clave si el PP y Ciudadanos sumaran sus 172 diputados

Desde la página 1 El tictac hacia las terceras elecciones generales sigue en marcha, sin que de momento se vea un posible acuerdo en el horizonte que ponga fin al bloqueo. Las urnas acentuarían las tendencias que ya se vieron el 26 de junio, pero apenas servirían para cambiar el panorama, ya que la división se mantendría y existirían prácticamente las mismas dificultades para formar Gobierno. Según la encuesta de GAD3 realizada para ABC, el PP sumaría otros cinco diputados, hasta llegar a los 142, mientras que el PSOE, Podemos y Ciudadanos volverían a perder terreno. La necesidad de un acuerdo seguiría siendo la misma que en la actualidad y con idénticos protagonistas.

El 31 de octubre se acaba el plazo constitucional para la investidura de un presidente del Gobierno. Si el acuerdo no es posible, el Rey disolverá las Cortes y convocará nuevas elecciones, las terceras en solo un año. La posibilidad de repetir las elecciones, algo «disparatado», según expresión de Rajoy, se ha instalado ya en el lenguaje cotidiano de los políticos. Nadie se atreve a descartarlas por completo. Pero lo más inquietante es que esas nuevas elecciones no garantizan ningún escenario diferente al actual, a la vista de la encuesta.

Solo sube el PP
El único partido de los cuatro grandes nacionales que ganaría en votos y diputados sería el Partido Popular. Con un 33,9 de estimación de voto, nueve décimas más que el 26 de junio, los populares lograrían 142 diputados. Son cinco más que los que tiene ahora mismo en el Congreso, y 19 más que los del 20 de diciembre. Su tendencia al alza es clara: en nueve meses ha ganado más de cinco puntos en estimación de voto. Pero sigue lejos de la mayoría absoluta (176 diputados), y los acuerdos serían tan imprescindibles como en diciembre y como en junio… Pero también igual de complicados.

Rajoy, como líder del partido ganador, tendría de nuevo la iniciativa de formar Gobierno. Necesitaría menos votos que antes, cierto, pero las combinaciones serían similares a las actuales. Con Ciudadanos (30 diputados), seguiría sin sumar lo suficiente. De nuevo tendría que mirar a un pacto múltiple en el que estuviera el PNV o bien volver a plantear un acuerdo al Partido Socialista. Si Ciudadanos veta al PNV, el PNV mantiene el rechazo a Rajoy y el PSOE sigue en el «no es no», el bloqueo se mantendrá intacto después de unas terceras elecciones que por sí solas no tienen la solución, como se observa en la encuesta.

Diez menos desde el 20-D
El partido de Albert Rivera perdería en esos nuevos comicios dos diputados, que en realidad serían diez si lo comparamos con su resultado del 20 de diciembre. Ciudadanos se queda en un 12,9 por ciento de estimación de voto, solo un punto menos que el 20D, pero la ley D’Hondt es especialmente implacable en esos porcentajes: un punto menos de voto es igual a 10 diputados menos. Los 30 escaños que conseguirían en las terceras tendrían la misma importancia relativa que sus 32 actuales, ni más ni menos: por sí mismos no serían determinantes.

El PSOE no ha tocado fondo aún, según se desprende de la encuesta de GAD3. El 20-D se quedó en 90 diputados, el 26 de junio bajó a 85, y ahora, si se celebraran nuevas elecciones, bajaría hasta los 81, con un 21,1 por ciento. Pedro Sánchez está rompiendo todos los registros negativos del PSOE, y ha logrado que el resultado de Rubalcaba en 2011, el peor de la historia de su partido hasta ese momento, se vea ahora como una meta difícil de alcanzar: entonces el PSOE obtuvo 110 diputados y un 28,76 por ciento de los votos.

La pérdida de cuatro diputados en el PSOE haría que Unidos Podemos se le acercara un poquito más. La formación de Pablo Iglesias solo se dejaría un escaño por el camino, y mantendría 70, con un 20,5 por ciento de los votos. La coalición de Izquierda Unida más Podemos no ha cumplido las expectativas que se habían marcado sus propios líderes y, lejos de mejorarlas en una nueva cita electoral, sufrirían otro retroceso que les haría ir a remolque del Partido Socialista.

Con estos resultados de los cuatro partidos nacionales, los escaños agregados por «bloques» quedarían así: PP y Ciudadanos sumarían 172 diputados; y PSOE más Unidos Podemos, 151. En diciembre, la diferencia era de 163 a 161, mientras que el 26 de junio se quedó en 169 frente a 156. La distancia se ha ido ampliando, y ahora mismo, según la encuesta, los partidos de Rajoy y Rivera estarían a cuatro diputados de la mayoría absoluta.

La carta del 25-S
Como se ve, el escenario de división sería muy parecido al actual, pero no idéntico. Si se mantuviera el bloqueo del PSOE, el PP podría mirar a Ciudadanos, pero también al PNV, que ganaría un diputado y pasaría de cinco a seis. El pacto triple (PP-CiudadanosPNV) permitiría la formación del Gobierno y la estabilidad posterior. El portavoz nacionalista vasco en el Congreso, Aitor Esteban, dio un sonoro «no» a Rajoy en su debate de investidura, «ahora y luego». Pero la encuesta del CIS sobre las elecciones vascas del 25 de septiembre dejó al descubierto una situación en la que el PNV podría necesitar al PP para la gobernabilidad en su Comunidad. Las opciones están abiertas, pero si el acuerdo fuera posible tras el 25-S, entonces no se llegaría a las terceras elecciones.

«La semana del 26 de septiembre sabremos si hay posibilidades de acuerdo o vamos directos a las urnas», advierten en La Moncloa. Todo pasa, de momento, por el resultado de las elecciones autonómicas vascas y gallegas.

En el resto de los partidos con representación parlamentaria, el único cambio se produciría en ERC, que ganaría otro diputado, hasta llegar a 10. Sus socios independentistas de la antigua Convergència podrían seguir arrinconados en el Grupo Mixto. Bildu continuará con dos diputados que nadie quiere para pactar con ellos, mientras que Coalición Canaria tiene garantizado el escaño de Ana Oramas.