Las listas del 26-J reavivan las tensiones internas en el PSOE

EL MUNDO – 29/04/16

· La nueva etapa de deshielo entre el Gobierno y la Generalitat quedó ayer formalmente inaugurada con la reunión de los vicepresidentes de los dos ejecutivos, Soraya Sáenz de Santamaría y Oriol Junqueras.

· Fue un encuentro «cordial y difícil», según lo definió Junqueras, pero que sirvió para llegar a un pacto tácito: las dos administraciones tratarán temas de carácter ordinario, dejando a un lado el proceso soberanista y evitando siempre que sea posible acudir a los tribunales para dirimir los conflictos.

El PSOE volvió a vivir ayer un día marcado por la tensión, esta vez generada por las conflictivas listas electorales. La intención de la dirección era tocar lo menos posible las candidaturas, pero la ex ministra Carme Chacón e Irene Lozano anunciaron que renuncian a repetir.

La renuncia de la ex ministra Carme Chacón fue sentida por todo el partido como un sonoro portazo al secretario general en un momento en el que ambos están muy distanciados.

Pero no fue el último abandono. El polémico fichaje estrella de Sánchez en 2015, la ex diputada de UPyD Irene Lozano, anunció tras el último Pleno del Congreso que tampoco repetirá en la lista socialista por Madrid por motivos profesionales.

Por último, la presidenta de la Junta andaluza, Susana Díaz, aprovechó para presionar a Sánchez para que sitúe en un mejor puesto al dirigente que le disputó el liderazgo en el verano de 2014, Eduardo Madina.

Díaz, muy callada en las últimas semanas, salió ayer en defensa del dirigente vasco que Ferraz quiere relegar, de nuevo, hasta la séptima plaza de la lista por Madrid. En diciembre no pudo salir elegido diputado.

La renuncia sorpresa de Carme Chacón fue la primera. La dirigente catalana había informado de su decisión a José Luis Rodríguez Zapatero, muy enfrentado a Pedro Sánchez, pero no al secretario general. Chacón no le llamó hasta pasadas las 21.00 horas del miércoles, poco antes de que lo hicieran público El Periódico de Catalunya y EL MUNDO.

Chacón trasladó por teléfono al secretario general su decisión: no encabezará las listas del PSC en Barcelona, como hizo en diciembre, a pesar de que el primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, se lo había pedido. En una comparecencia en el Congreso ayer por la mañana, aseguró que sus motivos son «políticos», aunque no los quiso explicar. También añadió que «no son relevantes».

Todos en el PSOE interpretan que su renuncia es consecuencia de la abismal distancia que le separa de Sánchez, del que en los últimos meses se ha ido alejando cada vez más, y también de la dirección del PSC. Como asegura una fuente de los socialistas catalanes, la ex ministra no quería volver a hacer campaña electoral con el secretario general. Tampoco se sentía apoyada expresamente por Susana Díaz –que ayer sí tuvo buenas palabras para ella–, así que decidió dar un paso atrás. Sólo continuará como secretaria de Relaciones Internacionales del partido hasta el próximo congreso del PSOE.

Chacón se iba a tener que batir en primarias al menos con el ex senador Carles Martí, lo que hacía aún más complicada su decisión de presentarse. Ella consideraba que iba a ganar el duelo interno, pero sentía que parte del PSC quería poner piedras en su camino.

Pero si la renuncia de Chacón fue un golpe para Sánchez, pocas horas después su fichaje estrelladel año pasado, Irene Lozano, dio un paso atrás y anunció que no volverá a la candidatura de Madrid por motivos profesionales que no explicó. La ex diputada de UPyD fue un fichaje personal de Sánchez que le trajo muchos problemas el pasado octubre. Tras el anuncio de su candidatura, varias federaciones socialistas, capitaneadas por Andalucía, protestaron de forma enérgica ante lo que consideraron «una cacicada». Lozano se había destacado hasta entonces por atacar con dureza al PSOE desde UPyD y Sánchez decidió ficharla, desplazando hacia atrás a importantes dirigentes socialistas de Madrid.

Lozano nunca fue del todo bienvenida. Tras el incendio grave inicial las aguas se calmaron, pero la militancia no recibió bien a la escritora y periodista, que se quedó por ello prácticamente sin hacer campaña.

Tras el malestar generado, Lozano hizo ayer realmente un favor a Sánchez con su marcha. Fuentes tanto próximas al secretario general como a la diputada aseguraron que él le pidió que siguiera. Sin embargo, fuentes de la Ejecutiva Federal no descartan que algún dirigente haya sugerido a Lozano que se eche a un lado, ya que en la lista de Madrid hay un importante problema de espacio. Pero ni desde la dirección ni desde el entorno de Lozano lo confirmaron.

EL MUNDO – 29/04/16