Obama y Trump, en guerra abierta por el ‘hackeo’ ruso

EL MUNDO – 08/01/17

· El presidente saliente ridiculiza a su sucesor: «Putin no está en nuestro equipo» El mandatario electo tuitea que, con él, Rusia respetará a EEUU «mucho más».

· El desencuentro entre Barack Obama y Donald Trump tomó ayer la forma de guerra abierta, un día después de que los servicios de Inteligencia de Estados Unidos publicaran un informe en el que señalan que el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó una campaña para influir en el resultado de los comicios porque prefería que ganara Trump.

El informe, elaborado por la CIA, el FBI y la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), asegura que el objetivo de la injerencia rusa en los comicios era socavar la credibilidad del proceso democrático y difamar a la candidata demócrata Hillary Clinton para reducir sus posibilidades de victoria en las elecciones.

Como respuesta a la polémica del hackeo ruso, el dirigente electo aseguró ayer en Twitter que Rusia respetará a Estados Unidos «mucho más» cuando él sea presidente. «Tener una buena relación con Rusia es algo bueno, no malo. ¡Sólo la gente ‘estúpida’, o los tontos, podrían pensar que es malo!», tuiteó ayer el presidente electo, quien el próximo 20 de enero sucederá a Obama en la Casa Blanca. «Tenemos ahora suficientes problemas alrededor del mundo sin necesidad de tener uno más. Cuando yo sea presidente, Rusia nos respetará mucho más que ahora», se jactó Trump.

El fuego había sido abierto poco antes por Barack Obama, que ridiculizó a su sucesor recordándole a él y a los republicanos –en una entrevista con la cadena de televisión ABC– que Putin no es del mismo «equipo». Obama reiteró que los rusos «se entrometieron» en las elecciones. El presidente demócrata se mostró preocupado porque parece que algunos republicanos se fían más de lo que diga Putin que de lo que digan los servicios de Inteligencia de EEUU sobre la presunta injerencia rusa en las pasadas presidenciales.

«Hemos visto últimamente que muchos republicanos o expertos o comentaristas de la televisión por cable parecen confiar más en Vladimir Putin que en sus compatriotas estadounidenses simplemente porque esos compatriotas son del Partido Demócrata. Eso no puede ser», dijo Obama. «Debemos recordar que [republicanos y demócratas] estamos en el mismo equipo. Vladimir Putin no está en nuestro equipo», reiteró Obama.

Pero el futuro presidente no piensa lo mismo. Abogó en Twitter por que Washington y Moscú tengan «buenas relaciones» y por que ambos países trabajen juntos para «resolver algunos de los grandes y urgentes problemas del mundo».

Trump ha sido criticado por los demócratas y por algunos republicanos a causa de los elogios que durante la campaña electoral y durante el periodo de transición le ha dirigido a Putin, del que ha dicho que es muy listo. También critican su tozudez a la hora de admitir las evidencias contra rusos que dicen tener los servicios de Inteligencia de su país.

Trump considera que el hackeo de los correos electrónicos del Partido Demócrata y su difusión en WikiLeaks no tuvo efecto en el resultado de los comicios y recordó que no hubo ningún tipo de manipulación de las máquinas de votación. Julian Assange, fundador de WikiLeaks, dijo a su vez que no fueron los rusos quienes les pasaron la información. Putin también niega cualquier injerencia.

Precisamente, uno de los retos a los que deberá enfrentarse Trump cuando asuma la Presidencia de EEUU es tratar de recomponer las relaciones con los servicios de Inteligencia, que en estos momentos están muy deterioradas. Trump ha dudado de la capacidad de los servicios de Inteligencia al recordar que ya se equivocaron en 2003 cuando dijeron que el entonces presidente de Irak Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva.

El equipo de transición de Trump anunció ayer que el magnate ha nominado al ex senador republicano Dan Coats para ocupar el puesto de director de Inteligencia Nacional. Coats, quien fue embajador en Alemania durante la Presidencia de George W. Bush y miembro del Comité de Inteligencia del Senado, deberá ser confirmado por la Cámara Alta.

Coats «ofrecerá un liderazgo firme que toda la comunidad de Inteligencia puede respetar y encabezará la vigilancia incansable de mi Administración contra aquellos que buscan hacernos daño», aseguró Trump. La función de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional (ODNI), creada después de los atentados terroristas del 11-S, es coordinar el trabajo de 16 agencias de Inteligencia estadounidenses, entre ellas la CIA y la NSA.

EL MUNDO – 08/01/17