Sánchez no contará con los barones en su Ejecutiva

ABC 25/05/17

· El nuevo líder encarga a José Luis Ábalos, de su plena confianza, la portavocía provisional del Congreso de los Diputados

Sánchez regresó ayer a Ferraz por primera vez tras su triunfo en las primarias del domingo. Volvía a su despacho, donde todo estaba como lo dejó el pasado 1 de octubre, tras su dimisión. Se repetía la escena de julio de 2014. Pero todo era distinto. En aquella ocasión entró a la sede el día siguiente a las primarias y acompañado por Susana Díaz. Él era secretario general gracias a ella. Y había que dejar claro el tutelaje desde el primer momento. Ahora se ha liberado de sus cadenas, hasta el punto de confirmar ayer que no piensa contar con ningún líder territorial en su nueva Ejecutiva.

En esta ocasión Sánchez ha medido los tiempos. Ha dejado pasar un par de días para reaparecer públicamente y ayer llegó a Ferraz acompañado de quienes están llamados a ser sus principales lugartenientes en esta nueva etapa: Adriana Lastra y José Luis Ábalos. Precisamente el secretario general del PSOE en la provincia de Valencia asumirá la portavocía «provisional» del grupo parlamentario socialista en el Congreso de los Diputados. Una decisión que es la única que tomará Sánchez respecto a los grupos institucionales hasta que pase el 39 Congreso Federal del partido. Y lo hace de forma obligada por la renuncia de Antonio Hernando.

Sánchez ha trasladado a la gestora, que es quien dirige el partido hasta el congreso, su decisión de situar a Ábalos en esa posición, pero dejando claro que, en principio, se tratará de una responsabilidad transitoria. Ábalos era uno de los favoritos para ocupar el puesto, pero la insistencia de los sanchistas en remarcar la provisionalidad del nombramiento hace pensar que el puesto que espera al diputado valenciano podría ser una de las principales secretarías de la nueva Ejecutiva. Lastra y él mismo son los favoritos para ocupar la Secretaría de Organización y el puesto de portavoz en el Congreso. Pero el motivo fundamental para optar por Ábalos en este momento –tendrá que ser el encargado de defender la posición del PSOE en la moción de censura planteada por Podemos– es que al tratarse de un miembro actual de la dirección del grupo parlamentario no hay que someter el cambio a la votación de los diputados. Más de la mitad de los 84 diputados socialistas se han significado en las primarias a favor de Susana Díaz, y Sánchez quiere evitar cualquier sobresalto en estos primeros compases de su segundo mandato.


Cambio total respecto a 2014
El nuevo secretario general está dispuesto a hacer una Ejecutiva a partir de la integración de todos los territorios, pero rechaza que las regiones tengan que participar en la nueva dirección a partir de cuotas preestablecidas. Pero lo que tiene decidido es que los secretarios generales autonómicos no formen parte de la nueva dirección. Aunque sí se compromete a apoyar a los gobiernos autonómicos. También Sánchez quiere llevar al Congreso Federal una Ejecutiva «paritaria e intergeneracional». Sí que tiene pensado «reforzar las áreas y la coordinación de determinadas secretarías». Lo confirmó en una conversación informal con periodistas que mantuvo después de celebrar una breve reunión con trabajadores del partido.

La decisión de no contar con los barones en la nueva dirección significa un cambio radical respecto a 2014, cuando la primera dirección de Sánchez incorporó a diez secretarios generales: José Miguel Pérez (Canarias), Ximo Puig (Comunidad Valenciana), Patxi López (Euskadi), César Luena (La Rioja) y Roberto Jiménez (Navarra). Y otros cinco eran vocales: Francina Armengol (Baleares), Rosa Eva Díaz (Cantabria), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha), José Ramón G. Besteiro (Galicia) y Tomás Gómez (Madrid).

Sánchez empieza a tomar así las riendas del partido. Aunque la gestora es la encargada de organizar el Congreso Federal, el equipo del nuevo líder tiene intención de mantener contactos con ellos para participar de esos preparativos y empezar a organizar una suerte de traspaso de poderes. Lo mismo ocurrirá en el grupo parlamentario. Ayer el PSOE presentó el listado de comparecientes en la comisión sobre la presunta financiación irregular del PP, empezando por la de Mariano Rajoy. Coordinando estos trabajos ya se han implicado Ábalos y Lastra.

Con quien no ha coincidido todavía Sánchez es con Javier Fernández. El presidente de la gestora lleva toda la semana en Asturias cumpliendo con sus compromisos institucionales. Tampoco estaba ayer en Ferraz el portavoz de la dirección provisional, Mario Jiménez.

A preguntas de los periodistas, Sánchez confirmó que no ha recibido ninguna felicitación ni de Mariano Rajoy ni de ningún otro dirigente del PP. Sí ha recibido felicitaciones del Rey y de líderes políticos como Pablo Iglesias, Albert Rivera, Íñigo Urkullu y Carles Puigdemont.