Sin España en dos horas

EL MUNDO 08/03/17
TEODORO LEÓN GROSS

LA MESA del Parlament donde JxSí impone su ley –no confundir su ley con la Ley– dio ayer luz verde a la reforma exprés para el referéndum. El ruido les vendrá bien en víspera de liberar los demonios del caso Palau, aquelarre en el que Montull vaticinó diversión. Al cabo, si algo define el proyecto indepe es el ruido. Su mayor éxito sería, claro, el 155. ¡Ah, si se escapara un tiro siquiera al aire…! Hasta ahora podían fantasear con un prusés heroico; pero ya es obvio que éste decaerá de puro ridículo. Claro que Convergència, desbordada por Esquerra, ya no piensa en el referéndum sino en llegar a las elecciones con algo de oxígeno. No será fácil. Aprobar la ruptura de España en un trámite parlamentario de dos horas de lectura única sin debate es lo que necesitaba el prusés para quedar elevado, definitivamente, a la categoría de sainete político. No hay ninguna posibilidad de que inspiren admiración, en Europa o aquí. Tan pronto crucen esa línea de las dos horas ya sólo provocarán risa.