¿Venezuela ligado a los etarras de España?

Lo cierto que este grupo separatista, comparado con lo que está sucediendo en México, es “ahora un juego de niños”, ya que diariamente nos levantamos con el noticiero, que nos informa como primera nota los muertos que día a día se suman en el país.

La noticia original

De conformidad con la prensa española el gobierno venezolano, podría tener no sólo vínculos, con el grupo extremista separatista español ETA, sino además habría apoyado la apertura de campos de concentración y adiestramiento para estos grupos, lo anterior de conformidad con las declaraciones de los ETARRAS, Javier Aristain y Juan Carlos Besance, quienes al ser detenidos por la policía española hicieron tales afirmaciones.

Esta noticia causó revuelo en España, así como el hecho de que el abogado de estos separatistas se apresurara a confirmar que tales declaraciones fueron realizadas bajo amenaza y tortura, más tarde el gobierno venezolano haría lo propio negando cualquier vínculo con este grupo.

La televisión española informó en días pasados que Arturo Cubillas, que también es acusado de pertenecer a este grupo separatista y de tres asesinatos en los años ochenta, trabaja desde 2005 como director de la oficina de administración y servicios del gobierno de Hugo Chávez.

La diplomacia española no se ha hecho esperar y sólo se ha concretado a señalar que no existe algún indicio o dato real de que así lo confirme, o que dichas declaraciones sean veraces, sin embargo instó al gobierno de Venezuela a iniciar una investigación con base en las declaraciones realizadas por estos separatistas detenidos ahora en España.

La televisión española ha hecho todo un culebrón de esto, e invitaron al escritor y periodista español Antonio Salas autor del libro “El palestino, historia de un infiltrado”, en el cual ha afirmado que pudo grabar con cámara oculta los campos de entrenamiento para terroristas en Venezuela, e incluso conoció al histórico etarra Arturo Cubillas.

La apología realizada a través del periodismo televisivo en España es realmente sorprendente, la idea era contestar la mayoría de las preguntas más de los cibernautas que de cualquier otro medio de comunicación.

Lo cierto que este grupo separatista, comparado con lo que está sucediendo en México, es “ahora un juego de niños”, ya que diariamente nos levantamos con el noticiero, que nos informa como primera nota los muertos que día a día se suman en el país.

Las cifras lo dicen todo, hasta el mes de julio de este año eran 24,826 víctimas por el crimen organizado incluyendo militares y sociedad civil desde que empezó el gobierno calderonista, y de 7,048 personas en lo que va del presente año 2010, esto según cifras oficiales.

La comparación que realizó el profesor Perry de la Universidad de Michigan es aún más cruda, éste afirma que existen más muertos en México por esta situación actualmente, que la muerte de ciudadanos estadounidenses en Irak, etiquetando a México como la “capital mundial del homicidio”. El profesor Perry prueba su dicho comparando los 5 mil 673 muertos de las guerras del narco con los “sólo” 4 mil 224 soldados estadounidenses muertos en Irak desde el inicio de la guerra en 2003.

El profesor Perry o como se llame, en esta afirmación hace una comparación de números con números y no sobre el número de militares americanos destacados en Irak, donde ahí el porcentaje de riesgo es mayor.

Amigo lector al ver estos números que asustan ante la muerte de tantos inocentes, es cuando nos preguntamos si se debe negociar o no, o si esto sería una medida obligada ante la incapacidad de gobierno y el ejército para derrotar al narco, y lo que es peor, los alcances de este comercio de miles de millones de pesos en las altas esferas de toda índole, sería interesante saber ¿cuántas familias campesinas viven como única salida del cultivo de marihuana?

Con qué poco se asustan los españoles con un ETA que se encuentra debilitado por la historia, nuestra realidad mexicana sí es un verdadero culebrón, lleno de aspectos crudos, cuya solución parece tardar muchos años.

La Jornada de Aguas Calientes (México), 28/10/2010