«Amaiur, como brazo político de Eta en el Congreso, me produce escalofríos»

EL IMPARCIAL, 7/1/12

A pocas semanas de cumplir un año y con apenas 12.000 afiliados, Foro Asturias logró hacerse el pasado 20 de noviembre con un hueco en el arco parlamentario, su segundo gran triunfo tras haberse aupado al poder en el Principado. Su único diputado en el Congreso, Enrique Sostres, atiende a EL IMPARCIAL y no duda en abordar temas tan espinosos como los recortes anunciados por el Ejecutivo de Mariano Rajoy, la presencia de Amaiur en la Cámara Baja o la complicada situación por la que atraviesa el Partido Socialista.

Tras la gran victoria que supuso el 20-N para su formación, ¿cómo ha sido el desembarco de Foro Asturias en el Congreso de los Diputados?
Ha sido un aterrizaje muy ilusionante, muy positivo, aunque hemos tenido que adaptarnos a una situación sobrevenida como es la de nuestra inclusión en el Grupo Mixto, un colectivo político muy numeroso y, al mismo tiempo, muy heterogéneo.

En un primer momento nosotros formábamos grupo con Upyd, algo que nos favorecía doblemente: por un lado podíamos tener más autonomía y, además, se reducía la formación mixta en la Cámara Baja fomentando el debate en el Congreso. En definitiva, está siendo una experiencia llena de ilusión.

¿Cuál es el proyecto político que defiende su formación en la Cámara Baja?
En primer lugar, queremos hacer llegar la voz de Asturias a todos los españoles a través del Congreso, allí donde se decide el futuro del país y se toman las decisiones. Somos un partido nuevo, no tenemos ni un año de vida y contamos con apenas 12.000 afiliados, pero hemos ganado las elecciones autonómicas y ya tenemos presencia en Madrid.

Asturias es una Comunidad que ha pasado de ser la séptima región de España respecto al PIB y a la población activa a ser, en los últimos ocho años, la decimocuarta o la decimoquinta, lo que le ha llevado a caer en el terreno de la marginalidad. Nuestra región ha tenido los mismos problemas que el resto de Comunidades Autónomas, pero sus singularidades en materia poblacional, económica e industrial hacen que su situación se haya visto mucho más agravada. Todo esto nos hizo ver que era necesario que la voz de los asturianos se escuchara en el Parlamento.

Por otro lado, nuestro otro objetivo es hacer ver que España no puede salir de la crisis si no arrimamos todos el hombro. Nosotros no queremos ser más que nadie, pero tampoco menos. Nuestro lema de campaña fue «Más Asturias, mejor España». Esa frase encierra toda la filosofía política de mi partido.

La irrupción de Foro Asturias en el Congreso sólo se ha visto superada por la de Amaiur, ¿cómo valora la presencia de la formación abertzale en la Cámara Baja?
La mera comparación de ambos partidos, de ambas filosofías o espíritus, ya lo dice todo. Amaiur, como brazo político de Eta en el Congreso, me produce escalofríos. Ellos han protagonizado una serie de números circenses, muchas veces rozando el vodevil, y situarlos en el mismo plano que nosotros, cuando no piden la disolución de Eta e igualan a víctimas y verdugos, no es de recibo. Ahora bien, no nos queda más remedio que tenerlos muy cerca en el Hemiciclo.

¿Está Foro Asturias abierto al diálogo con Amaiur?
Tajante y radicalmente no. No tenemos nada que hablar nada con ellos y ni siquiera haremos el más mínimo gesto de acercamiento. Cuando Eta esté disuelta, cuando haya entregado las armas, cuando las víctimas hayan visto salvaguardados sus derechos y cuando el Estado haya adjudicado todas las responsabilidades, entonces podremos hablar.

A pesar de llevar poco tiempo en el poder, el nuevo Gobierno ya ha tomado drásticas medidas económicas, ¿cómo las valora?
Desde el punto de vista de España, las decisiones adoptadas por el Ejecutivo tienen por objetivo paliar el problema del déficit, que está dos puntos por encima de lo dicho en un principio por el PSOE, lo que supone, al cambio, un gasto extra y un ajuste de 20.000 millones de euros. Ahora bien, en el discurso de investidura de Mariano Rajoy, a pesar de que se preveía este incremento presupuestario, no se expuso ninguna posibilidad de subirle los impuestos a los españoles, como sí se ha hecho en el último Consejo de Ministros.

El ajuste ha comenzado por lo más fácil, por los ciudadanos, los auténticos paganos de la crisis, y no por las Administraciones Públicas estatales o autonómicas. Eso, en nuestra opinión, representa una medida francamente desafortunada y sorprendente.

Usted afirmó recientemente que su respaldo al PP pasaría por una mayor inversión en infraestructuras en Asturias, pero los malos augurios económicos apuntan a un recorte en ese sentido. ¿Qué pasará con ese diálogo de no cumplirse sus expectativas?
Las medida adoptadas en los últimos días también debemos leerlas desde una lectura asturiana. La reducción del gasto se enfoca en cuatro escenarios principales: Industria, Infraestructuras, Ley de Dependencia y Asuntos Exteriores. En los tres primeros, Asturias se ve muy afectada y nos supone una reducción presupuestaria de aproximadamente 1.000 millones de euros, el 10 por ciento del total del recorte estatal. Esto significa que una Comunidad que ostenta el 2 por ciento del PIB con relación al resto del Estado tiene que soportar una décima parte del ajuste total del país. Esto no es de recibo ni nos parece justo.

Nosotros no diremos aquello de que «donde hay confianza da asco». Foro Asturias ha apoyado la investidura de Mariano Rajoy, pero eso no significa que sea a costa de nuestro silencio cuando afecta al ajuste económico de nuestra región. No estamos dispuestos a aceptar estos recortes porque nos lleva prácticamente a la quiebra.

Cambiando de orilla, ¿cómo ve la situación de futuro del PSOE con la actual inestabilidad interna?
La oposición siempre es importante, ya que sin ella no hay alternativa democrática. No cabe duda de que la corrosión del anterior Gobierno del señor Rodríguez Zapatero no sólo ha afectado a la propia estructura política y económica del Estado y a sus instituciones, sino que ha hecho lo propio con el PSOE dejándolo como un auténtico erial. Los socialistas van a tener que luchar para salir de la situación terrible en que les ha dejado el zapaterismo, que ha llevado a la crisis a todo un cuerpo social, y conformar, con mucho esfuerzo, un nuevo partido.

Alfredo Pérez Rubalcaba o Carmen Chacón, ¿con quién se queda?
Gracias a Dios, es una decisión que yo no tengo que tomar. Es como tener que elegir entre veneno sólido o líquido.

EL IMPARCIAL, 7/1/12