Imaz afirma que si el Congreso rechaza el plan Ibarretxe «en pocas semanas habría un escenario electoral»

El presidente del PNV afirma que la sociedad vasca tendría que dar su opinión sobre lo que supone una «postura cerrada» del PP y PSOE. Imaz ha rechazado que su partido quiera aprovechar el rechazo en las Cortes para enarbolar la «bandera del victimismo» en estos comicios.

El presidente del PNV, Josu Jon Imaz, ha asegurado que si el martes el Congreso de los Diputados debate y rechaza el plan Ibarretxe, «en pocas semanas habría un escenario electoral». En ese sentido, Imaz ha rechazado que su partido quiera aprovechar el rechazo en las Cortes para enarbolar la «bandera del victimismo» en estos comicios.

Sin embargo, ha asegurado que el escenario electoral que se presenta de aquí a primavera permitirá al tripartito vasco mostrar a la sociedad el rechazo a la negociación de las principales fuerzas nacionales. «Diríamos a la sociedad vasca que ha habido una actitud de bloqueo y que su voz ni siquiera ha sido escuchada. Es evidente que en pocas semanas tendríamos un escenario electoral en Euskadi y la sociedad vasca tendría que dar su voz y su opinión sobre lo que supone una postura cerrada que es la que PP y PSOE están manteniendo», ha manifestado.

En cualquier caso, el dirigente nacionalista ha mostrado su deseo de que esto no ocurra y que el Tribunal Constitucional (TC) ordene retirar del orden del día del Congreso del próximo martes el debate a la totalidad sobre el Plan Ibarretxe. Su objetivo es que esta propuesta sea previamente debatida en la Comisión Constitucional, con una representación del Parlamento vasco.

«Abramos un escenario sincero de diálogo y de negociación a partir del 1 de febrero en Cortes Generales. No tienen nada que temer», ha declarado. A juicio de Imaz, la amplia presencia con la que cuentan socialistas y populares en esa institución y el hecho de que Alfonso Guerra ostente la presidencia de dicha comisión les permite «medir si realmente nuestra voluntad negociadora es sincera».

El presidente del EBB ha rechazado las críticas porque se recurra al TC: «¿Cuándo el PNV o el Gobierno vasco han incumplido la Constitución? En el procedimiento seguido hasta el momento, en ningún caso el Gobierno vasco, ni PNV, EA e IU hemos incumplido en ningún momento la Constitución», ha asegurado, comparando este hecho con los «incumplimientos sistemáticos» que los diversos gobiernos centrales han hecho del Estatuto de Gernika. «Que nos hablen del acatamiento de las leyes tiene narices», ha afirmado.

Necesidad de una negociación

Por todo ello, el líder jeltzale ha insistido en la necesidad de abrir una negociación porque «ahora tenemos la oportunidad» y es la «responsabilidad» de todos los partidos políticos. Imaz ha negado en todo momento que nos encontremos ante un plan «rupturista o soberanista».

Asimismo, ha señalado que «no existe fractura social» en el País Vasco, sino que la fractura es entre los partidos políticos, y eso es lo que hay que solucionar. Respecto al referéndum prometido por los dirigentes nacionalistas, Imaz ha subrayado que éste se realizará «en ausencia de violencia» y que esto no se dará «hasta que exista una desaparición definitiva de ETA y hayan sido eliminados los atentados de cualquier tipo, las amenazas y extorsiones».

El presidente del PNV ha afirmado que la consulta popular no se podría realizar «si no existiese igualdad de condiciones». Pero de momento, y hasta que se de esa situación, Imaz ha afirmado que «no podemos dar las llaves de la política a ETA» y «renunciar a hablar entre nosotros». «La amenaza terrorista no es un factor que esté actuando sobre el ámbito de un Parlamento o una mesa de los partidos», ha dicho.

EL CORREO, 26/1/2005