Otegi, «brazo ejecutor» del plan político de ETA

ABC, 10/5/12

El Tribunal Supremo el líder batasuno pudo pedir a la banda terrorista que abandonara las armas, pero no lo hizo

El Tribunal Supremo ha rebajado la condena impuesta a Arnaldo Otegi por la Audiencia Nacional porque considera que no existen pruebas de que su actuación en el «caso Bateragune» fuera la de un dirigente de la organización terrorista ETA. Pero lo que sí está claro para el alto Tribunal es que el exportavoz batasuno fue el «brazo ejecutor» de la banda terrorista en la puesta en marcha de su proyecto político.

«Simulando» el abandono de la violencia, la obsesión de ETA era volver a las instituciones a través de un partido político que resucitara la ilegal Batasuna y consiguiera sumar en su seno todas las fuerzas soberanistas del País Vasco. Es ahí donde entra en juego el exlíder batasuno.

Otegi no pidió a ETA que abandonara las armas

Los cinco magistrados de la Sala Segunda que firman la sentencia señalan que el elemento determinante para condenar a Otegi ha sido «la coincidencia efectiva» de su actuación como impulsor del proyecto Bateragune «con las actividades de naturaleza política que ETA había planificado escasos meses antes», y todo ello «sin abandono en ningún caso de la lucha armada». ETA deja en segundo plano la violencia y da prioridad a su proyecto político, pero no renuncia a ella. Para llevar a cabo ese plan, la banda criminal «se valió de Otegi como brazo ejecutor», asegura el Supremo.

El Supremo no se cree la vocación pacifista que alega Otegi, ni tampoco su oposición al uso de la violencia por parte de ETA. Y por ello, de acuerdo con la sentencia dictada por la Audiencia Nacional, señala que si fuera verdad, lo «razonable» hubiera sido que Otegi aprovechara sus numerosas comparecencias públicas «para manifestarse abiertamente en contra de la actuación terrorista preconizada por ETA». Pudo pedir a la banda que abandonara las armas, «lo que no hizo –señala el Supremo–, como tampoco condenó los ataques violentos que, en paralelo, se iban produciendo por parte de la organización criminal».

«Es incierto –concluye la Sala– que el procesado actuara públicamente en abierta oposición a ETA en aras de lograr por cauces estrictamente democráticos esa finalización del uso de la violencia y terror por parte de la misma».

ABC, 10/5/12