El comité de sabios

Asegura el firmante que lo más divertido del informe jurídico encargado por Ibarreche sobre su Plan es la sugerencia de crear un «comité de sabios» para revestir de autoridad la iniciativa. Intuyendo la dificultad de la propuesta, Ussía ofrece al Lehendakari una relación de sabios que estarían dispuestos a formar parte de tan fabuloso comité.

ABC ha publicado el texto íntegro del documento redactado por juristas contratados por Ibarreche en el que analizan las posibilidades de sacar adelante el llamado «Estatuto de libre asociación de Euskadi». Los expertos juristas, muy a su pesar, llegan a la conclusión de que el plan es inviable, si bien se inventan trucos y subterfugios para abrir puertas a Ibarreche en su cretino laberinto. Los expertos juristas -algunos de ellos procedentes de Madrid- concluyen que la iniciativa afecta materialmente al texto constitucional y que el Congreso de los Diputados podría paralizarla desde el primer momento. Benigno Pendás, con su sensatez y sabiduría habituales, nos recuerda que el proyecto se apoya en falsos derechos históricos y que la síntesis del mismo es sencilla. No existe trámite posible para una ley imposible. Pero lo más divertido del informe jurídico de los allegados a Ibarreche es la creación de un «comité de sabios» para revestir de autoridad la iniciativa. Claro que encontrar sabios dispuestos a avalar una ley imposible se me antoja una tontería, porque los sabios no son tontos, precisamente por ser sabios, y el sabio que acepte figurar en tan extraño comité pierde instantáneamente su condición de tal. No obstante, y para que Ibarretxe no se sienta desasistido del todo y pueda reunir a ese comité de sabios imprescindibles, le ofrezco una relación de sabios que estarían dispuestos a formar parte de tan fabuloso comité.

Arnaldo Berruezogoyri Azpeleta. Durante años fue el encargado de determinar las dietas alimenticias de los peces del «Aquarium» de San Sebastián, sito entre las rocas del Monte Urgull, junto al muelle de los pescadores. En diez años, jamás se equivocó, y dio a las lubinas lo que necesitaban las lubinas, a las doradas lo que gustaban las doradas y a los besugos lo que los besugos demandaban. Un auténtico sabio.

Jesús Ardeola-Aranaz y Lasartemendi, conocido también por «Pipirrinchi». Vecino de Hernani y gran aficionado a correr los encierros en las fiestas pamplonesas de San Fermín. Su dominio de la carrera en la cuesta de Santo Domingo es prodigioso, y en veinte años jamás ha sido alcanzado por toro alguno. Además, canta muy bien los zorcicos y es autor del libro «Elogio y defensa de los bueyes autóctonos del valle de Ipintza» (dos ediciones agotadas). Un sabio de los de verdad.

Jose María (Joshemari) Recaldeguren Gazteapaolaza. Ilustre pionero del montañismo vasco que consiguió escalar en el verano de 1974 el monte Igueldo por las vías del funicular sin que el descendente -el del anuncio amarillo de Sigma- y el ascendente -el del anuncio azul de Louit- consiguieran atropellarlo. Una sobrina en primer grado de Recaldeguren Gazteapaolaza fue novia formal de un primo de monseñor Setién. Imprescindible su presencia en el Comité.

Domingo (Chomin) Urruchurtu de Arcaute. Aprobó con media notable la EGB y está considerado como el mejor apostante de regatas de trainieras. Si Urruchurtu dice que gana Orio, gana Orio, y si al contrario opina que Pasajes de San Juan, Pasajes de San Juan le moja a Orio la oreja. Fundamental para el comité.

Además de estos cuatro sabios, podrían ingresar en el comité elegido para dar prestigio al plan de Ibarreche Miguel Herrero de Miñón, María Antonia Iglesias, Karra Elejalde, Juanma Bajo Ulloa, Manu Chao, Antonio Álvarez Solís, Javier Clemente, Francesco Cossiga, el juez Manuel María Zorrilla y, para darle un color vivo y brillante al Comité, cualquiera de los ciclistas del equipo Euskaltel.

Y a ponerse a trabajar para dar prestigio al proyecto. De nada, Ibarreche, faltaría más, siempre a su disposición para lo que guste mandar.

Alfonso Ussía, ABC, 10/9/2003