Dos miembros de la Fundación para la Libertad se entrevistaron durante dos días con distintos parlamentarios suizos tras la creación del Grupo Parlamentario Suiza-País Vasco.
Teo Uriarte y Javier Elorrieta en el Parlamento suizo
Javier Elorrieta, vicepresidente de la fundación, viajó a Berna junto a Teo Uriarte. Ambos fueron miembros de ETA en la época franquista y ahora viven amenazados por el terrorismo.
Según Elorrieta, los legisladores suizos con los que hablaron les trasladaron que el grupo parlamentario tiene poca importancia y no es representativo en el Legislativo suizo. “No le dan un valor especial y pensamos que es así. Sólo les hemos alertado de la utilización propagandística que hace Batasuna en España de este grupo minoritario para darse una cierta legitimidad”, explica a swissinfo.ch.
Elorrieta y Uriarte visitaron la capital suiza antes de acudir, el  viernes 12 de marzo, al Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra  para pedir que se nombre un relator especial para proteger los derechos  humanos y las libertades fundamentales en las sociedades amenazadas por  el terrorismo.
Renuncia de Vischer
El citado grupo parlamentario fue creado en enero pasado y quedó  inscrito en el Legislativo helvético. Lo preside Josep Zisyadis,  diputado del Partido del Trabajo por el cantón de Vaud, y su finalidad  es reforzar las líneas entre ambos territorios y contribuir a una  solución pacífica en el País Vasco. El otro de los representantes, el  ecologista Daniel Vischer, salió del grupo la pasada semana según  informaron los diarios ‘Aargauer Zeitung’ y ‘Le Temps.
“Nos reunimos en primer lugar con el diputado socialista Hans Widmer (Lucerna) y la senadora demócrata cristiana Anne Seydoux (Jura), de la comisión de Política Exterior del Consejo de los Estados (cámara alta)”, explica Elorrieta. “Les expusimos que el grupo citado está auspiciado por Batasuna con motivos propagandísticos de sus posiciones. Algo que no viene nada bien en la lucha contra el terrorismo ni para la situación de los vascos no nacionalistas que viven amenazados”.
En la segunda jornada de debates se encontraron con Eric Voruz, diputado  del Partido Socialista (Vaud) y con Luc Barthassat, demócrata cristiano  del cantón de Ginebra y que forma parte de la comisión de Política  Exterior del Consejo Nacional (cámara baja).
Encuentros positivos
Elorrieta expone que no les fue posible encontrarse con el diputado  Josep Zisyadis. “Nos hubiera gustado explicarle cuál es la situación en  el País Vasco, pero él ha rechazado la reunión y no le pudimos entregar  documentación sobre la situación. Nosotros seguiremos con la voluntad de  debatir con Zisyadis para insistir que detrás del grupo está Batasuna”.
Por su parte, el representante de la Fundación para la Libertad en la  Confederación, Noël Pedreira, relata a swissinfo.ch que los encuentros  mantenidos han sido muy positivos, ya que en Suiza se conoce poco la  realidad del País Vasco. “Cuando les decimos que cualquier concejal no  nacionalista de cualquier municipio tiene escolta se quedan alucinados.  No entienden estos hechos pero nos apoyan. Eric Voruz fue alcalde de  Morges (cantón Vaud), y la actual alcaldesa, de origen vasco, ya le  había comentado lo que pasaba en el País Vasco. Se mostró muy  interesado”, dice Pedreira.
Posible visita al País Vasco
Los miembros de la fundación invitaron a los políticos suizos a visitar  el Parlamento vasco o a que reciban a diputados de la región española.  “Representantes de todo el arco político del Parlamento Federal Belga  convivieron unos días con concejales municipales vascos del Partido  Socialista y del Partido Popular y vieron la situación real de estas  personas. Se dieron cuenta de que la violencia no acaba con el acto  terrorista, sino cómo se traduce en el miedo existente desde el punto de  vista social y la anomalía política que se vive allí”, indica  Elorrieta.
En este sentido, Pedreira tratará de conseguir que una delegación  oficial de parlamentarios vascos visite la Asamblea Federal de Suiza y  viceversa.
Vascos no nacionalistas
El antiguo terrorista Teo Uriarte, fue condenado a dos penas de muerte  en el proceso de Burgos y pasó ocho años en prisión (Cáceres y Córdoba)  hasta que en 1977 la amnistía general liberó a todos los presos  políticos del franquismo. Uriarte expone a swissinfo.ch que el diputado  socialista Hans Widmer les preguntó por qué no se convocaba un  referéndum en el País Vasco.
“Nuestra respuesta fue: mientras exista violencia, el pueblo no podrá ir a votar en libertad. Y cuando no haya violencia nadie pedirá la convocatoria de un referéndum”, acotó Uriarte.
“El mundo radical del nacionalismo vasco ha obtenido una victoria en términos de propaganda y es difícil acabar con esa imagen. Las reivindicaciones del nacionalismo vasco asumen el planteamiento de que todos los vascos son nacionalistas. Cuando ahora gobierna precisamente el Partido Socialista. El Parlamento tiene una mayoría no nacionalista, pero hasta ahora el discurso del nacionalismo ha dominado la cobertura en la prensa internacional”, lamenta Teo Uriarte.
Iván Turmo, SWISSINFO.CH, 10/3/2010