El PP se queda solo en su idea de postergar la ponencia de víctimas policiales, que se crea el 11

El PP se quedó solo ayer en la Junta de Portavoces en su postura contraria a habilitar una fecha en julio para constituir la ponencia de víctimas de excesos policiales ocurridos en el contexto de la lucha contra el terrorismo.

La mayoría integrada por los grupos que participarán de los trabajos de ese foro -el PP se descolgó finalmente de él lo mismo que UPyD- decidió ayer constituirla el lunes próximo, después de que la Mesa del Parlamento tramitara ayer la petición cursada el jueves por PNV, PSE, Aralar y EA.

Frente al deseo de esos grupos, la representante del PP en la Junta de Portavoces, Laura Garrido, dijo no comprender la urgencia de la actuación ni las razones por las que la constitución de la ponencia no podría esperar hasta el siguiente período de sesiones, tras las vacaciones veraniegas. Esta posición de la portavoz del Grupo Popular reafirmó ayer al resto de los grupos en la sospecha de que la negativa de la presidenta del Parlamento, Arantza Quiroga, a facilitar la puesta en marcha del grupo de trabajo el jueves, al término del pleno, obedecía al escaso interés de los populares en un foro a cuya formación se han opuesto y en el finalmente no van a tomar parte. A causa de esas sospechas registraron la petición de habilitar julio, que ayer tramitó la Mesa del Parlamento y respaldó la Junta de Portavoces por amplia mayoría.

La presidenta de la Cámara vasca, a su vez, tendrá que presidir la formalización del grupo de trabajo, ya que no está adscrito a ninguna comisión, tal y como los grupos accedieron a hacer, justamente para facilitar la incorporación del PP. De otro modo, habría sido la presidencia de la comisión correspondiente la que habría corrido con esa tarea, poco grata para Quiroga, dado el desacuerdo de su grupo.

Los populares han estado en el consenso parlamentario sobre estas víctimas hasta este momento. Tanto el pasado mes de diciembre, cuando el Gobierno presentó su informe, como en abril de 2011, cuando el Parlamento aprobó la iniciativa que desemboca ahora en la formación de esta ponencia, aunque a este extremo se opuso. A los populares les ha creado recelos, y también algunos roces internos, el temor a que ese grupo de trabajo se asimile en la opinión pública al foro permanente existente en la Cámara para las víctimas del terrorismo.

Los grupos que participarán en ella tienen descartada sin embargo, cualquier equiparación, ni siquiera de funcionamiento. Para empezar, la ponencia no recabará testimonios de personas afectadas, como sí se hizo con las víctimas del terrorismo.

EL PAÍS, 5/7/2011