La carpintería metálica

EL MUNDO 15/02/17
SANTIAGO GONZÁLEZ

·Uno va teniendo la impresión de que en Posemos se han tomado al pie de la letra lo de la gente al poder. Lo había anunciado su padre espiritual en memorable conversación con su evangelista Millás: «Todas las noches le digo a mi mujer: ‘No sabes, Sonsoles, la cantidad de cientos de miles de españoles que podrían gobernar’».

Así las cosas, presidir el Parlamento balear es tarea que podrían acometer con maña varios millones de españoles. Podemos ha nombrado, con el apoyo de los socialistas, a un antisistema, un tipo con nombre de personaje de Eduardo Mendoza, Balti Picornell, que es republicano, filocomunista, anticlerical, filocatalanista y animalista, todo va en el mismo kit. Como escribió el crítico Juan Avilés, basta oír a alguien lo que piensa de los alimentos transgénicos para conocer su posición en el conflicto de Oriente Medio.

Balti es prolífico en Twitter, donde acusa a Felipe VI: «Algún dictador te dejó arraigada su semilla». «Esto son las heridas habiertas [sic] de tu régimen monárquico podrido» y otros ingeniosos juegos de palabras en que sustituye borbónico por bubónico. Él era carpintero metálico antes de asaltar su cielo. No es un caso único. Las Islas Baleares son prolíficas en estos fenómenos.

En estos días está siendo juzgado el rapero Valtonyc, por una canción titulada Circo Balear, en la que pide la muerte para el Borbón y el presidente del Círculo Balear. Él se ha quejado de que la canción se la pidió Pablo Iglesias, que ahora calla como una puta.

Pero Pablo empezó con aquel delirante editorial en Fort Apache donde proclamó que la guillotina era la madre de la democracia. Luego le siguieron por orden de aparición, sus novias; primero Tania: «Una familia real de gatillo fácil y huesos débiles sólo tiene una salida #guillotina». Le tomó el relevo en el corazón y los videos del califa, y también en la vocación calcetera, Irene Montero: «#FelipenoserasRey que vienen nuestros recortes y serán con guillotina». «Todos los Borbones a los tiburones», decía en un segundo tuit. E insistía en un tercero: «#FelipenoserasRey porque hueles demasiado a Franco, a Tatcher [sic], a Friedman y a Chicago Boy [otro sic]». ‘Irene Krupskaya’ apunta como portavoz, no porque sea la novia del jefe, claro, sino porque hay que feminizar el partido, con lo fácil que sería poner al general José Julio y a Cañamero a decir «nosotras estamos hartas de tanto heteropatriarcado», un suponer.

Cantaron con entusiasmo en la clausura antiguallas que yo cantaba hace 40 años. L’ estaca, un suponer. Impresionaba ver a José Julio Rodríguez, un tipo que ha alcanzado el máximo rango en el Ejército español, general de cuatro estrellas, cantando con suave balanceo de caderas: «Si jo l’estiro fort per aquí/ i tu l’estires fort per allà,/ segur que tomba, tomba, tomba,/ i ens podrem alliberar». No tenía práctica, pero le sobraba la convicción que aportaban los camaradas: Diego Cañamero, asaltador de hipermercados, Manolo Monereo y Gloria Elizo, esa diputada que sólo tiene vivienda en Madrid y cobra por desplazamientos 1.824 euros al mes.

Del paso de Carme Chacón por Defensa, lo peor fue el nombramiento de este tipo como Jemad y, de todo lo que hizo él en tan alto cometido, lo peor fue dejar escapar a los piratas del Alakrana con el rescate. ¡En una zodiac, mientras Rodríguez tenía mando sobre un helicóptero Seahawk! Aunque seguramente recibía órdenes, porque es inimaginable que llegara a general del Aire suspendiendo Cinemática. Vistalegre 2 me ha ratificado en la impresión que ya me produjo hace dos años Vistalegre 1 y que creo haber escrito por entonces: «Hablan en nombre de la gente y son gentuza. Despotrican contra la casta y son castuza».