La encuesta del Ararteko

La condena sin paliativos del terrorismo, que alcanza el 46% en los alumnos del modelo en castellano, se queda en el 17% en los del euskera. Mikel Azurmendi exageraba al calificar el euskera como «la lengua en la que se mata». Es sólo la lengua en la que se enseña a nuestros escolares a disculpar el crimen.

Iñigo Lamarca, el ararteko, ha dado a conocer una encuesta sobre la actitud de los escolares vascos respecto al terrorismo, realizada a 762 adolescentes en las edades de la ESO, entre los 12 y los 16 años. El 14,8% de los encuestados se opone a rechazar a ETA, mientras otro 14% evita pronunciarse al respecto.

La ETB del antiguo régimen habría titulado: «Más de un 70% de los jóvenes vascos se oponen a la violencia». Todos los veranos era un clásico la encuesta que nos era presentada con el siguiente titular:

«El 85% de los vascos no se irían a vivir fuera de Euskadi aunque les garantizaran el mismo salario en otro lugar».

¿Quién se iría fuera de su tierra, su casa, su paisaje habitual y sus amigos, para ganar lo mismo, se preguntaba uno (es probable que también Uno) al oír cada verano semejante melonada?

Algo ha debido de cambiar, porque hasta Deia enfoca la noticia por la anómala excepción, pero hay en la encuesta del Ararteko algún detalle de interés, al desagregarla por modelos lingüísticos. Resulta que los estudiantes del modelo A, que se imparte en castellano, muestran un rechazo del terrorismo en el 80%, en castellano. El porcentaje de repudio a ETA baja hasta el 62% entre quienes estudian en el modelo D, que se imparte en euskera. La actitud más alta de rechazo a ETA, la condena sin paliativos del terrorismo, que alcanza el 46% en el modelo A, se queda en el 17% en el modelo D.

Es justo recordar en este punto el escándalo que suscitó Mikel Azurmendi al al calificar el euskera como «la lengua en la que se mata», ya se sabe que las metáforas son interpretadas muy a menudo en sentido literal. Exageraba. Es sólo la lengua en la que se enseña a nuestros escolares a disculpar el crimen.

Santiago González en su blog, 14/7/2009