Los escenarios de Rivera sobre Murcia: no descarta el adelanto electoral

LIBERTAD DIGITAL 02/03/17

· El encuentro de este jueves entre el presidente murciano y el líder regional naranja será un mero trámite para confirmar lo enconado de las posturas. 

Este jueves, el presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, se entrevistará con el líder regional de Ciudadanos, Miguel Sánchez, cuatro días antes de declarar como imputado por el caso Auditorio, que data de cuando el dirigente popular era alcalde de Puerto Lumbreras. El encuentro es más simbólico que práctico, por cuanto las posturas de ambos son tan conocidas como distantes: Ciudadanos reclama su dimisión en virtud del acuerdo de investidura alcanzado en 2015 y el jefe del Ejecutivo se niega a marcharse, postura que han respaldado en público sus principales compañeros de partido, incluido Mariano Rajoy.

En Ciudadanos auguran que la declaración del próximo lunes no aclarará nada -esto es, seguirá imputado-, por lo que se abrirían dos dos escenarios posibles en el futuro inmediato: que Ciudadanos explore con PSOE y Podemos una moción de censura o que Pedro Antonio Sánchez, haciendo uso de su prerrogativa, convoque elecciones anticipadas.

En el cuartel general de Ciudadanos, aunque no pueden renunciar a amenazar veladamente con la primera de la posibilidades como baza negociadora, contemplan el adelanto electoral no sólo como la opción más posible, sino como la que permitiría a los de Albert Rivera superar una situación que les aprieta en el zapato desde hace dos semanas y que ha deslucido la que era una de sus principales apuestas en el Congreso de los Diputados para esta legislatura: la presentación de una Ley Integral, precisamente contra la corrupción.

La reforma electoral en Murcia
Para entender esta posición conviene tener en cuenta dos aspectos concretos de la realidad murciana: las condiciones para una llamada anticipada a las urnas y la propia ley electoral, reformada esta misma legislatura.

Según el artículo 27.4 del Estatuto murciano, Pedro Antonio Sánchez puede adelantar las elecciones al haber transcurrido más de un año desde las anteriores, en mayo de 2015, y faltar aún más de un año para las próximas. Además, según la norma estatutaria, aunque se celebrasen las autonómicas de manera anticipada este 2017 se deberían volver a celebrar en 2019, junto a la mayoría del resto de comunidades autónomas. La nueva cita con las urnas tendría lugar con una circunscripción única y con un mínimo del 3% de votos para lograr representación, merced a la reforma implementada recientemente a iniciativa de Ciudadanos, con la que la formación naranja confía en aumentar de cuatro a seis o siete sus representantes en la cámara autonómica, siempre y cuando mantenga, como en las pasadas generales de junio de 2016, un porcentaje de voto superior al 15%.

En el caso de adelanto, además, la presión del caso Auditorio recaería exclusivamente sobre el PP, arguyen en el partido naranja, toda vez tendría que decidir si presentar a un candidato imputado.

El PP no tiene miedo a las urnas
«Allá ellos», responden en el PP sobre los planes de Ciudadanos. De momento, Sánchez sigue contando con el apoyo de prácticamente todo su partido, a excepción de un concejal que ha dimitido en la localidad de Molina de Segura. De hecho, además de continuar al frente del Gobierno, es el único candidato a presidir el partido a nivel regional los próximos 4 años, tras presentar 5.000 avales de los 90 exigidos. «No tiene ningún tipo de imposibilidad interna ni legal que le impida ser el presidente del PP de Murcia», se le avaló desde Génova, precisando que una cosa es el pacto en Murcia y otro el suscrito a nivel nacional.

En síntesis, Rajoy ha escuchado las explicaciones de Sánchez y, a día de hoy, no ve razones suficientes para poner en duda su palabra. Y de ahí que el PP insista en que la línea roja ha de ser la apertura de juicio oral, como Ciudadanos reclama a nivel nacional. «Después del 6 de marzo, día de su declaración, el globo se pincha», según el entorno del presidente regional, que da por descontado que el procedimiento judicial no seguirá adelante.

En este sentido, en el PP acusan al PSOE de intentar que esa declaración se retrase -denuncian que recusaron al juez del caso, pero «se lo han tirado para atrás»- para que la presión vaya a más sobre Ciudadanos y acabe explotando. «Es evidente que hay una persecución política del PSOE contra Sánchez», se puede leer en los argumentarios del PP, como ya dijo Maillo. Incluso Cristina Cifuentes, muy firme en la lucha contra la corrupción, se ha postulado del lado del presidente murciano rechazando que tenga que hacerse a un lado.

Así las cosas, con Rajoy sujetándole y proclamado único candidato al congreso regional, el equipo de Sánchez asegura que no tiene miedo a las elecciones, aunque precisa que su objetivo es que todo continúe como hasta ahora. «En junio, conseguimos el 47% de los votos», rememoran. «Estamos al borde de la mayoría absoluta».