Los flamencos apoyan a Sortu

«Es primordial que se pare la violencia. Si la violencia persiste dará una coartada al poder central español. Yo digo que los contrarios al nacionalismo vasco están contentos cuando ven bombas», manifestaba el eurodiputado flamenco Erik Depoort en el acto de apoyo a Sortu celebrado en San Sebastián.

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Los eurodiputados flamencos desean que Europa se implique

¡La proximidad entre los flamencos y los nacionalistas vascos no es de hoy! La eurodiputada Frieda Brepoels recordaba el sábado en San Sebastián que el partido nacionalista flamenco participó a su manera en el Aberri Eguna (prohibido) de Guernica celebrado en 1975, unos meses antes de la muerte del general Franco.

Ese día, desafiando en cada momento a la presencia policial, dos militantes flamencos provistos de una bandera vasca, se presentaron en las puertas de la iglesia, frecuentado punto de encuentro en una ciudad literalmente ocupada por la policía, en presencia de algunos militantes y periodistas. Los flamencos fueron interrogados poco después de la salida de la misa…

Treinta y seis años más tarde, Frieda Brepoels, vicepresidenta de la Nueva Alianza Flamenca, y el eurodiputado Erik Depoort, presidente de ALE (Alianza Libre Europea, constituida por los movimientos regionalistas minoritarios europeos) daban su bendición a la izquierda abertzale surgida de Batasuna que el sábado todavía confirmaba el carácter “irreversible” de su posición a favor de la no violencia.

“Estaba horrorizado”

“La ALE se sitúa bajo la bandera del derecho inalienable a la autodeterminación, pero ese derecho sólo puede manifestarse a través de acciones democráticas. Por eso la situación anterior del País Vasco me entristecía, me horrorizaba”, declaraba Erik Depoort.

Y el eurodiputado belga continuó: “Hoy me alegro del cambio ocurrido. Hoy es absolutamente esencial que Madrid renuncie definitiva y francamente a la estrategia represiva…”

Erik Depoort se dirigía a los centenares de personas reunidas en el frontón Atano III partidarias de los acuerdos de Guernica, firmados en octubre de 2010 fundamentalmente por Eusko Alkartasuna, Aralar, Abertzaleen Batasuna y la izquierda abertzale surgida de Batasuna.

Esto dentro de la perspectiva de un alto el fuego de ETA “permanente, indefinido y verificable”, el que se anunció el 10 de enero de 2011.

“Sensibilizar a Europa”

La ALE, como fácilmente recuerda su presidente, se ha esforzado para “llevar” la cuestión vasca al parlamento Europeo como Basque Frienship Group (creado en 2004) con el fin de impulsar un proceso de paz en el País Vasco. “Los esfuerzos de todos estos años terminarán por desembocar en la paz” añade. “Pero para avanzar, es absolutamente necesario sensibilizar a Europa. También es primordial que se pare la violencia. Si la violencia persiste dará una coartada al poder central español. Yo digo que los contrarios al nacionalismo vasco están contentos cuando ven bombas…”

El sábado, más de veinte colectivos y asociaciones se adhirieron a los Acuerdos de Guernica. Entre ellos, Anai Artea (comité de paoyo a los refugiados creado en el lado francés en los años 70), representado por su presidente Michel Mendiboure y su predecesor Jean Fagoaga.

Sud Ouest (Francia), 2/3/2011