Un alivio que podría no durar mucho

VICTORIA PREGO, EL MUNDO – 14/01/15

· El Tribunal Supremo proporcionó ayer un alivio considerable a las asociaciones de víctimas del terrorismo y a una parte mayoritaria de la sociedad española. La perspectiva de asistir a un nuevo episodio de excarcelaciones masivas de terroristas etarras era de imposible digestión para casi todos los españoles por más que tuviera que ver con la transposición de una Decisión Marco de la Unión Europea. Porque ya nos tuvimos que tragar la anulación de la doctrina Parot que sacó a la calle en un plazo de semanas a decenas de asesinos, de la banda y de otras especialidades, y que llenó al país de estupor y desolación.

Y ya tuvimos entonces la impresión, fundada, de que esa sentencia del Tribunal de Estrasburgo era el resultado de una infame intervención del único juez español que formaba parte de él, y también de una clamorosa e imperdonable falta de dedicación del Gobierno a una causa en la que los españoles nos estábamos jugando mucho. De ese trauma nacional no nos hemos recuperado todavía y, ahora, una decisión del Tribunal Supremo en el sentido de respaldar el criterio de la Sección Primera de la Audiencia Nacional, con el que se puso en libertad, entre otros, a ‘Santi Potros’, el individuo que ordenó la matanza de Hipercor, hubiera resultado insoportable para la mayoría de ciudadanos.

Sin embargo, no está todo dicho todavía. Primero, porque una parte de los magistrados de la Sala de lo Penal son partidarios de consultar al Tribunal de Justicia de la Unión Europea para que aclare las dudas sobre si la famosa Decisión Marco de la UE se ha aplicado adecuadamente en la legislación española. Y nos podemos encontrar de nuevo con que el pensamiento impecable de quienes no han padecido nunca, ni comprenderán jamás, el calvario que ha sufrido este país azotado por el crimen organizado de la banda terrorista nos impongan otra vez el aguantar en silencio la salida masiva a la calle de quienes han sido nuestros verdugos y no han pagado ni de lejos por toda la sangre que han derramado.

Y segundo, porque ya el propio Pikabea y los dirigentes de Bildu, secundados por el PNV, han puesto desde ayer todas sus esperanzas en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para que antes o después vuelva a enmendar la plana al Alto Tribunal español. Si eso fuera así, y no es descartable que suceda, habría que concluir que la legislación comunitaria tiene un poso de radical injusticia en relación con las víctimas de los terrorismos. Pero habrá que ver si a partir de ahora, cuando toda Europa se siente ya acosada y golpeada por la amenaza yihadista, se aplica a los casos que se planteen en el futuro la misma vara de medir que se le ha impuesto con tan higiénica indiferencia a la sociedad española.

De momento, felicitémonos por esta victoria de una justicia realmente digna de ese nombre. Y crucemos los dedos.

VICTORIA PREGO, EL MUNDO – 14/01/15