DIARIO VASCO, 5/9/11
Patxi Zabaleta Coordinador general de Aralar. Defiende la entente soberanista para las generales: «La situación política de Euskal Herria va a seguir cambiando y Aralar quiere contribuir»
Pese a la contestación que más de un tercio de la asamblea de Aralar mostró el sábado a la entente con EA, Alternatiba y «la otra sensibilidad» de la izquierda abertzale para acudir a las generales del 20-N, Zabaleta defiende que «un respaldo del 61% es lo suficientemente firme como para ser desarrollado».
-¿La decisión de la asamblea nacional de Aralar no tiene vuelta atrás o puede haber sorpresas en el congreso del día 17?
-Teóricamente podría tener vuelta atrás, porque todo partido puede revisar sus propias decisiones, pero en la práctica es un acuerdo en firme tomado por el órgano soberano del partido, que es la asamblea.
– ¿Un apoyo del 61,4% lo considera un respaldo consistente o con riesgo de provocar grietas o tensiones?
– Es un acuerdo en el que ha existido un debate muy amplio sobre temas muy diferentes y diversos. Por tanto, considero que un respaldo del 61,4%, sin ser una decisión unánime, es sin embargo una decisión suficientemente firme y, a mi juicio, debe ser desarrollada. Pero siempre respetando al 35% que votó en contra.
– O sea, ¿que no cree que pueda afectar a la unidad del partido?
– Bueno, todo partido es una entidad viva, compuesta por personas que piensan y discuten. Debe ser así. Pero yo no puedo manifestar nada más allá del resultado que hay.
– ¿Por qué Aralar va a ir en coalición con los partidos que integran Bildu?
– Las razones son múltiples, pero las podría resumir en tres. Estamos ante unas elecciones generales con una situación económica crítica en la que es necesario que se oiga con fuerza la voz de las fuerzas progresistas y de izquierdas. En segundo lugar, porque desde el punto de vista de la paz y la normalización política, en Euskal Herria faltan caminos pero se han hecho caminos. No se puede olvidar todo lo que de alguna manera se ha andado. Hace más de dos años que no ha habido atentados de ETA. Hasta el propio Ares, queriendo arrogarse el mérito de no sé qué de una manera injustificable, ha constatado que no existe más que algún acto aislado, y luego rechazado, de kale borroka. Se han dado pasos muy importantes y la situación política es muy diferente. Todo eso debe ser tomado en consideración. Y en tercer lugar, qué duda cabe de que la situación política va a seguir cambiando, y hay que contribuir a ese cambio. Por eso, creemos que hay bases suficientes.
– (…)
– Por otro lado, nosotros ya planteábamos que para las elecciones del Congreso de los Diputados había que conformar una fuerza amplia de izquierdas y progresistas dentro del ámbito abertzale. Y en el caso del Senado, nuestra apuesta, a la que el PNV nunca ha contestado, era la de Euskal Herria Bai, o una especie de Entesa a la vasca. Pero bueno, el PNV va a tener mañana una reunión con EA, Alternatiba y la otra sensibilidad de la izquierda abertzale. Ellos dirán. Nosotros creemos que debería ser una propuesta objeto de atención. En la última legislatura el PNV tuvo dos senadores, por lo que debería tener en cuenta estas circunstancias.
– Pocos creen ya en el Senado.
– El Senado es una cámara objeto de mil críticas, muchas de ellas muy justificadas, pero tiene la vocación de ser la cámara de representación de los territorios autonómicos. A nuestro juicio, al igual que en Alemania, es la cámara donde debería reflejarse el derecho de veto y el ejercicio del derecho a decidir. En el caso de Alemania, Baviera ha ejercido el derecho de autodeterminación.
Nuevo nombre
– ¿Se sabe ya cómo se va a llamar este nuevo sujeto electoral?
– No, ha habido nombres sobre la mesa. Sí hemos hablado de la posibilidad de que tenga una diferenciación en Navarra.
– ¿Y qué futuro le queda ahora a NaBai?
– NaBai es la fuerza que encabeza la oposición en Navarra y en muchos ayuntamientos, como en Pamplona. Por eso, nosotros tenemos que seguir trabajando. Seremos completamente fieles a esa marca. En el caso del Congreso, hace algún tiempo ya planteamos que nuestro criterio era acudir al 20-N en Navarra bajo la marca Nafarroa Bai-Bildu, y para la CAV Bildu-Aralar. Pero un grupo de independientes, entre ellos Uxue Barkos y el PNV, no consideró oportuno ni siquiera entrar a hablar de este tema. Aralar siempre ha dicho que el veto no se puede poner de dentro a fuera ni de fuera adentro. Respetando esas posturas, hemos seguido adelante. Por tanto, y en resumen, salvo cambio de ellos, las fuerzas que formamos NaBai no vamos a estar juntas en estas elecciones.
– ¿Pero tras el 20-N su intención es mantenerse en NaBai o habría que volver a analizar los acuerdos?
– Lo firmado, firmado está. Cumpliremos lo firmado. En el Parlamento de Navarra y en los ayuntamientos aún quedan tres años y medio por delante.
– Bien, ¿pero cómo se quedan las relaciones con el PNV?
– Aunque ellos nos han descalificado de una manera insultante, nosotros no les vamos a insultar.
-¿Dentro de la entente para el 20-N, Aralar va a pedir a Bildu que sea más exigente con ETA?
– Nuestra postura siempre ha sido muy clara con respecto a ese tema, y también en relación a las actitudes políticas antidemocráticas del Estado. El reflejo de ello es el Acuerdo de Gernika. Seguiremos trabajando para que ese acuerdo se cumpla en su integridad. Es el camino a seguir. Supone la verdadera ruta de la pacificación. Por eso, seguiremos trabajando con los que han firmado el acuerdo de Gernika, y con los que no lo han firmado: PSOE, PP, PNV…
-Por cierto, ¿este acuerdo puede hacer replantearse a Aralar su entrada en la Diputación de Gipuzkoa?
– Es un tema completamente diferente. Seguiremos trabajando como alternativa y oposición en el Parlamento de Navarra y con nuestro grupo en el Parlamento Vasco.
– ¿Pero para futuras elecciones sería partidario de esta entente?
– Yo creo que las siguientes elecciones están aún muy lejos. De momento, habrá que tener este preacuerdo con EA, Alternatiba y la otra sensibilidad de la izquierda aber-tzale como un antecedente, y todos los antecedentes en política influyen, pero no es una exigencia imprescindible. La política da una vuelta cada día porque es, al fin y al cabo, el reflejo de la vida.
DIARIO VASCO, 5/9/11