ETA encargó a Batasuna, en diciembre de 2008, la necesidad de conformar un «polo soberanista sin el PNV» para volver a las instituciones y arrebatar así a la formación nacionalista «la hegemonía política». Así lo aseguró ayer un perito de la Unidad Central de Inteligencia (UCI) de la Policía durante el juicio que se celebra en la Audiencia Nacional contra Arnaldo Otegi y otros siete acusados por el intento de refundación de la ilegalizada Batasuna.
atasuna. Todos ellos se enfrentan a penas de hasta 14 años de cárcel por un delito de integración en ETA. Después de cinco sesiones de «mítines», ayer llegó el turno de los peritos, que empezaron a apuntalar las acusaciones contra los procesados. Y fue este policía el primero que echó por tierra las declaraciones del ex portavoz batasuno y de los demás acusados, que en todo momento habían desvinculado a la organización terrorista de la nueva estrategia de la «izquierda abertzale». Así, el agente aseguró que fue la banda criminal la que trazó las líneas maestras de ese cambio de estrategia —de cuyo liderazgo presumió Otegi— para «adaptarse a las nuevas circunstancias», algo que ETA «siempre ha sabido hacer».
En esa estrategia político-militar hay un reparto intencionado de papeles en el que ETA encarna la violencia y la izquierda abertzale los aspectos políticos. «Pero la dirección única queda en manos de ETA», señaló el perito durante una extensa declaración (dos horas) que hoy continúa con los interrogatorios de las defensas. El experto explicó que la «acumulación de fuerzas» (cuyos frutos se han visto con la llegada de Bildu a las instituciones) se planteó como algo necesario después de que ETA se diera cuenta de que el Estado empezaba a «neutralizar actividades que se encontraban bajo cobertura legal». La estrategia político-militar estaba «cada vez más debilitada» y la banda terrorista era consciente de ello.
Fue así como ETA decide en diciembre de 2008 que «va a dar parones en la violencia para aglutinar a los agentes políticos y sociales independentistas», una misión que queda encomendada a Bateragune. «ETA es la dirección y Bateragune ejercería la codirección en el ámbito político. Todo forma parte de un mismo conjunto», declaró el perito.
El experto explicó que este plan de aglutinación o acumulación de fuerzas empezó a idearse tras el atentado de la T-4 (diciembre de 2006), que puso fin al proceso de paz. «Había que llenar el cerdito», señaló en alusión al término con el que los proetarras se refieren (en la documentación intervenida) a la obtención de fondos.
«Escaleras y descansillos»
El cese temporal de la violencia por parte de los criminales también formaba parte de ese plan y estaba estrechamente vinculado a la «convergencia de formaciones independentistas». «Era una estrategia de escaleras y descansillos», dijo el perito. «En los dos polos a la vez es imposible operar; no se puede avanzar en el plano político y en la unidad abertzale mientras se está matando. Son términos incompatibles. No conozco a nadie que haya planteado las dos cosas a la vez , es imposible. Cuando se asesina es difícil que la gente vaya contigo y eso es lo que de alguna manera ha venido sucediendo», dijo.
Como pruebas de la supuesta vinculación entre ETA y «Bateragune», el agente citó un documento intervenido a la acusada Miren Zabaleta en el que ETA «evaluaba cómo se habían cumplido las directrices» que dio a la izquierda abertzale en abril de 2009 (celebración conjunta del Aberri Eguna y del 1 de mayo, convocatoria de una huelga general y conformación de una candidatura única para las elecciones europeas de junio) y «marcaba criterios sobre cómo se debía desarrollar el debate».
Plataforma electoral
Ese documento, denominado «Komunikazio Orokorra» («Comunicación General») y dirigido a Zabaleta —según el fiscal—, fijaba «un calendario de actuaciones» sobre el debate que la izquierda abertzale inició en octubre de 2009 y en el que acabó desmarcándose de la lucha armada y apostando por vías exclusivamente «pacíficas y democráticas». «ETA alude a todas las cuestiones de las que sólo puede hablar ETA y sobre ese modelo dice que será un proceso de ETA pero sin ETA», explicó el perito.
También aludió a un documento intervenido al etarra Ekaitz Sirvent en el que se apostaba por «la convergencia de agentes políticos y sociales independentistas» y la constitución de una plataforma electoral denominada «Euskal Herria Bai».
ABC, 5/7/2011