Javier Elorrieta-Editores
Los Talibanes están a punto de hacerse con todo Afganistán . Las niñas dejarán de ir a las escuelas y se quemarán fotografías y alguna estatua que quede por ahí será derruida.Pero estatuas ya se están rompiendo por todo occidente Volverán las lapidaciones, y las Universidades occidentales ahondarán su estupidez con las políticas de género, se arrodillarán ante las botas de un miembro de Black Lives Matter.. Querrán igualarnos en miseria intelectual y material, La morralla historiadora española silenciaran la historia y harán mohines y desprecios a Roca Barea, a los Hispanistas de uno y otro lado del Oceano. Los que recogen con mayor objetividad tanto las expediciones como estrucuturas y leyes que rigieron lla primera y grandiosa globalización que se hizo desde España.
Menos mal que, desde la escuela de materialismo filosófico de Oviedo y jóvenes marxistas actuales, como Santiago Armesilla, Guillermo del Valle, Paloma Hernández. Pedro Insua y otros, como Gómez Maestro, confluyen en valoraciones históricas con esos historiadores no contaminados hasta el disparate antiespañol, con las falacias de la Leyenda Negra, a la que siguen apuntados algunos memos con doctorado. Menos mal que eran «afectos al materialismo dialéctico». Aunque en realidad están más por Gibson que por Elliot o por Stanley.
En Chile, y en otros lugares, están impulsando reaccionarios movimientos indigenistas, que como los nacionalismos locales, no buscan la igualdad integradora sino la diferencia que les permita privilegios soportados en un aislacionamiento que los mismos quieran ahondar. ¿Dónde? . En el espacio físico e histórico dónde no hubo colonización, dónde las leyes amparaban una integración para todos los moradores, independientemente de su raza. En el conjunto de Hispanoamérica. No en los territorios dónde se dio, en serio, el aniquilamiento de los indígenas por el colonialismo anglosajón. Los que piden derruir las estatuas de Cristobal Colón o Fray Junípero Serra, pero ni se les ocurriría desechar la figura de Búfalo Bill.
En fín, no se pierdan ningún artículo