Ayer conocíamos una carta escrita por el entonces ministro de Fomento, José Luis Ábalos en julio de 2019 a Juan Guaidó, etiquetado en el encabezamiento como “presidente (e) de la República Bolivoriana (sic) de Venezuela”, título que ahora no se le reconoce ni a él, ni al presidente electo Edmundo González. En la misva se anuncia que es propósito del Gobierno de España afianzar los lazos políticas, culturales y económicos con Venezuela y se anuncia que para ello “hemos enviado a don Víctor de Aldama Delgado no solo para hacerle llegar esta misiva, sino también para qu surva de enlace en nuestras relaciones”. Esta era la relación que no tenía con Aldama. Hemos vista también la foto de Aldama sentado a la derecha de Ábalos en una mesa del sancta Sanctorum de Ferraz, frente empresarios venezolanos enviados por Guaidó. Al fondo, como siempre, Koldo Gª Izaguirre, que ayer debutó ante el Tribunal Supremo, peroi no supo explicar el llamativo aumento de su patrimonio entre los años 20 y 22. Preguntado por el hecho de que se encontrasen en su casa 24..000 euros en metálico dijo que era una costumbre familiar.
Guillermo Gujarro, que es uno de los perseverantes de nuestra República de los tonnntos daba ayer la noticia del fallecimiento de la actriz Marisa Paredes: “Muere MARISA PAREDES, una grande de nuestra cultura e ISABEL SS, persona moderada, bondadosa, educada y portadora de sólidas convicciones muestra su cariño a los familiares y amigos”. Al parecer, Isabel San Sebastián participaba en ‘La mirada crítica’ junto a Javier Casqueiro, que glosó la figura de la actriz fallecida, de la que destacó que era una mujer «comprometida no solo con la sanidad pública sino también políticamente, muy comprometida siempre». Isabel San Sebastián replicó que Marisa Paredes era una mujer «comprometida con la izquierda». «Con la sanidad pública y con la democracia», le ha matizado el periodista. «Como has dicho políticamente, comprometida con la izquierda, con la política de la izquierda», ha insistido San Sebastián.
Es evidente que tenía razón Isabel San Sebastián. Yo de Javier Casqueiro tengo en mi memoria un titular imborrable en El País. Supongo que entonces sería becario, por la desmesura que escribió: “Fallece un industrial cosido a hachazos”, decía el titular. Valdría si hubiese escrito ‘cosido a navajazos’, pero a hachazos.,,
Rosa Villacastín censura el comentario de Isabel: “Hasta donde llega el odio, madre mía”. Lo curioso es que escribe esto como respuesta a un tipo que en su tuit decía: “El cuerpo aún caliente de la gran Marisa Paredes y la sinvergüenza de Isabel San Sebastián mostrando su miseria moral para no perder costumbre. Marisa estuvo comprometida en su vida con lo que le salió de su grandísimo coño”. Con perdón, así en el original. ¿Y por qué tenía razón Isabel? No tengo yo para olvidar el día que falleció Concha Velasco, una gran mujer y también gran actriz. En la capilla ardiente estaba Marisa Paredes respondiendo a una entrevista. Hubo un cierto revuelo y alguien que estaba junto a ella explicó: Es Isabel Diaz Ayuso. Paredes se rebotó como si le hubiera picado una avispa: “¿Isabel Díaz Ayuso? Por Dios, ¿Qué hace aquí? ¡Fuera!” ¿Qué es el odio me preguntas…? Siempre tuve a Marisa Paredes por una buena actriz. Las hubo mejores, pero ella era muy correcta. Lo que no era correcta es como persona, como demuestra este intento de apropiarse del acto fúnebre por Conchita Velasco, que era una excelente actriz y una grandísima persona.
Con la afición a meterme en charcos, que es marca de la casa, me puse a enredar en internet y vi un vídeo en el que ella contó que tuvo una hija después de la muerte de Franco y que dio gracias porque su hija no iba a vivir una dictadura como la que ella tuvo que sufrir. Pero que hace dos años tuvo una nieta y pensó que su nieta probablemente sí iba a vivir una dictadura. Este es uno de esos casos de antifranquismo sobrevenido, porque en este plan recordé que en vida del dictador, en febrero de 1975 hubo una huelga de actores que terminó con detenciones y multas. Allí estaban nuestros actores de izquierdas, Juan Diego, Ana Belén, Tina Sáinz. Pero hubo nombres sorprendentes: Lola Flores, Sara Montiel, Esperanza Roy, Tomás Zori, que era empresario y garantizó a sus bailarinas un 50% del sueldo para que pudieran aguantar la huelga. También hicieron huelga Mª José Alfonso, Enriqueta Carballeira, Lina Morgan, Marisol y Rocío Dúrcal y Alicia Sánchez, que es tía de Clara e Isa Serra. Pero de Marisa Paredes no he encontrado rastro. En fin, ya dijo Antonio Banderas que en 1978 Franco llevaba más tiempo muerto que ahora.
Se cuenta en El Debate que María Blasco, directora del Centro Nacional de Investigación contra el Cáncer, se compró al contado dos casas en Galicia. Y esto se dice después de saber que esta mujer recibió como sobresueldos 90.000 euros en tres años, aunque con ese dinero no puedes comprar dos casas y que se las ha comprado con que lo hizo a medias con Ruth Toledano, la tía a la que encargó la gestión de la división artística de la lucha contra el cáncer y la compra de obras de arte. Ruth Toledano es periodista y activista de los derechos de los animales. No diré más. Bueno, sí, que los investigadores del CNIO han pedido al Gobierno la destitución de María Blasco.