- Aunque el verbo exacto no es ese, sí es verdad que existe un inmenso hartazgo con vosotros, y las razones son bien fáciles de explicar
Francisco Javier López Álvarez, Pachi para el mundo de la escena, tiene su mérito. Con una potencia neuronal más bien contenida ha logrado no dar un palo al agua fuera de la vida pública en sus 65 años de existencia, siempre gozando además de buenos puestos. ¿Cómo lo ha logrado? Fácil: se enroló de juvenil en la misma empresa de la que vivió su padre y de la que vive ahora también su mujer. Se llama PSOE S.A.
En plena marejada de chamullos zarandeando la balsa de la Medusa del PSOE, el Pericles del Bocho ha comparecido el Congreso con ese tono de enojo regañón que tanto le complace. Con su conocido genio dialéctico, lanzó al aire con gesto apesadumbrado un par de preguntas retóricas: «¿Por qué nos odian tanto? ¿Qué hemos hecho?». Y él mismo respondió. Según su diagnóstico, el «odio» atiende a que el Gobierno ha acometido una redistribución socialista de la riqueza que no se le perdona. Los damnificados por la justicia social del PSOE «han salido de cacería con medios antidemocráticos».
Admirable Pachi, te veo un poco desorientado. En primer lugar, la palabra no es «odio». Lo que sienten millones de españoles ante el actual régimen socialista-comunista-separatista es hartazgo, o incluso repugnancia, y una enorme preocupación. Pero para que lo entiendas sin problemas, te lo vamos a explicar con unos puntos del manual Sanchismo para Dummies:
-Os «odian», Pachi, porque en una misma vida no se puede portar con lágrimas en los ojos el féretro de un compañero asesinado por ETA y un par de décadas más tarde defender encantado una repulsiva alianza del partido de esa banda terrorista, que es exactamente lo que tú has hecho.
-Os «odian», Pachi, porque mentís más que habláis. Ejemplos recientes. Asegurasteis que la protesta vecinal de Paiporta, la del famoso galgo a la fuga, atendía a una trama «perfectamente organizada por la ultraderecha». Era mentira. La policía desmintió a Sánchez. Dejasteis caer que el apagón podía deberse a un ciberataque. Era mentira. Culpasteis de la filtración de los mensajes entre Ábalos y Sánchez a la UCO y los jueces. Era mentira. El filtrador era Ábalos (al que por cierto todavía no habéis echado del PSOE, ¿por qué será?).
-Os «odian», Pachi, porque vuestro amado líder tomó el poder con el pretexto de acometer una gran limpieza y ha acabado protagonizando el primer caso de corrupción incrustado en el corazón del Gobierno, la primera imputación de la mujer de un presidente, y los espectáculos penosos del fiscal y del hermanísimo. Aquí está imputada ya hasta la anterior presidenta de Adif, por enchufar durante dos años y medio en un empleo público ficticio a una meretriz con la que se solazaba el hombre fuerte de Sánchez (e ibais de súper feministas…).
-Os «odian» porque perseguís e insultáis a los jueces y los periodistas que cumplen con su deber. Os «odian» porque vuestro insufrible ministro de Justicia es un comisario político fanatizado, que acosa con sus llamadas a abogados del Estado y hasta a la presidenta de Poder Judicial (las consignas a Ortiz y Pumpido no las incluimos en la categoría de presiones, porque es como si estuviesen en nómina del PSOE).
-Os «odian» porque habéis sido unos felones con vuestra patria, España, y habéis aflojado sus hilvanes para primar a un separatismo rancio, supremacista y que aspira a destrozar nuestro país.
-Os «odian», Pachi, porque vuestra jerga cursi, intrusiva y supuestamente social es más cargante que una tortilla de gominolas y porque pretendéis que el Estado regule hasta cómo miccionamos.
-Os «odian», Pachi, porque el cañón de propaganda del Gobierno jamás había sido tan obsceno como en esta era del culto al líder de Fortes, Intxaurrondo y similares, del bufón de cámara colocado por Sánchez en el prime time, de los presentadores multifracasados rescatados en nuevos programas-mitin para que arenguen a favor de la causa.
-Os «odian», Pachi, porque estáis montando un país peronista, anestesiado por la subvención, porque fomentáis la pereza frente al esfuerzo, porque cortáis las alas al que aspira a ir a más, porque habéis creado un Estado socialista confiscatorio, en el que en realidad casi trabajamos para el fisco.
Pachi, no te odio. Hasta me tomaría un pote por Pozas contigo para charlar de Springsteen y Tom Petty. Pero me encantaría perderte de vista y que dirigiesen España políticos competentes, no apparatchiks del PSOE como tú, sin estudios ni currículo, y cebados de un extraño rencor sectario, que te impide hasta reconocer que el único hito de tu vida política, presidir el País Vasco, lo lograste por cortesía del PP (para acto seguido dilapidar la ocasión con tus complejos ante el nacionalismo del PNV).
Una famosa -y buena- película ochentera del irregular Steven Soderbergh se llamaba Sexo, mentiras y cintas de vídeo. Si el vídeo lo cambiamos por el guasap ya tenemos la historia del PSOE 2025.