Pablo Sebastián-Vozpópuli
- El presidente del Gobierno levanta el vuelo mientras la Justicia estrecha el cerco sobre La Moncloa
Donald Trump ha amenazado de manera infame a España con el aumento de los aranceles y con un lenguaje propio de los tiempos de Al Capone -‘no quieren pagar y pagarán el doble’- en respuesta a las mentiras de Pedro Sánchez que firmó el pacto para el aumento del gasto de Defensa de la OTAN hasta el 5 %, acordado en la cumbre de la Alianza Atlántica en La Haya. A lo que después el español añadió que nuestro país no pasará del 2,1 % del PIB. Lo que para Sánchez, que citó a nuestro Ejército como el autor del cálculo, es suficiente para las ‘capacidades’ hispanas de defensa en el marco atlántico.
Lo que provocó la ironía del primer ministro belga, Bart de Wever, diciendo que si Sánchez logra ese objetivo es que es ‘un genio’. O, como poco, un mago del escapismo porque, como él esperaba, Trump le ha dado alas ‘de cera’ como las Ícaro para volver a levantar el vuelo hacia el sol de la Justicia y la estabilidad de su Gobierno entre el entusiasmo de militantes, votantes y de sus aliados de la extrema izquierda.
Trump olvida que, en su reciente bombardeo de Iran, las bases españolas de Morón y Rota jugaron un importante papel de ‘puente aéreo’ trasatlántico, en la llamada ‘operación martillo’ contra Irán
Lo que completará con sus socios nacionalistas con la aprobación en el TC de la Ley de Amnistía, camino, entre cumbres variadas de la UE y la ONU y de sus esperadas comparecencias en el Comité Federal del PSOE del 5 de julio y en el Congreso de los Diputados el día 9. Tras lo que iniciará las que considera sus ‘merecidas’ vacaciones de verano en La Mareta y cerca de su compadre José Luis Rodríguez Zapatero.
Sabiendo Sánchez -lo que desconoce Trump-, que la UE es también una Unión Aduanera lo que impide imponer aranceles a un solo país y negociar de manera bilateral con ningún país de la UE. De la misma manera que Trump olvida que, en su reciente bombardeo de Iran, las bases españolas de Morón y Rota jugaron un importante papel de ‘puente aéreo’ trasatlántico, en la llamada ‘operación martillo’ contra Irán. Cuyos resultados positivos, jaleados por Trump, fueron cuestionados en un informe ‘preliminar’ del Pentágono publicado por la CNN y The New York Times, medios a los que Trump calificó de ‘escoria’.
Sánchez levanta el vuelo mientras la Justicia -el lunes declara Cerdán ante el Tribunal Supremo, tras las recientes comparecencias de Ábalos y Koldo– y la UCO estrechan el cerco hacia la posible ‘financiación ilegal’ del PSOE. Y la posible implicación de miembros del Gobierno y del presidente. Al tiempo que se espera el procesamiento del fiscal general, Álvaro García Ortiz, y que empeora la situación judicial de su hermano David Sánchez y de su esposa Begoña Gómez.
Está última, más ‘tocada’ tras decidir la Audiencia Provincial de Madrid que sí ùdo haber ‘malversación de fondos públicos’ en los trabajos de la ‘asistente’ de Begoña, Cristina Álvarez, por su implicación en los negocios privados de la esposa de Sánchez, tras ser nombrada por Presidencia del Gobierno, lo que señala al ministro Félix Bolaños, y lo que debería facilitar su investigación por malversación en el Tribunal Supremo, como lo ha pedido el juez Peinado.
Un Tribunal Supremo que, mientras espera que el Tribunal Europeo se decida a valorar los recursos y, en su caso, bloquear la Ley de Amnistía, no aplicará la amnistía al prófugo Carles Puigdemont por cuanto se benefició, como otros implicados, personalmente de la malversación en el ‘procés’.
Pedro Sánchez se alejó con toda intención en la foto de familia para, siguiendo su norma de hacer ‘de la necesidad virtud’ lograr réditos en la política española gracias a la embestida de Trump
Mientras tanto, Trump ha rectificado sus malas relaciones con la OTAN y, en parte, con la UE, porque ambas necesitan a los EE.UU. y especialmente en lo que se refiere a la guerra de Ucrania (Zelenski fue apartado de la cumbre de La Haya). Lo que explica aunque pero no justifica la sumisa devoción trumpista del secretario general de la Alianza Atlántica, Mark Rutte.
Una OTAN de cuya foto oficial de La Haya Pedro Sánchez se alejó con toda intención para, siguiendo su norma de hacer ‘de la necesidad virtud’ lograr réditos en la política española gracias a la embestida de Trump. Y una UE que debería, más que nunca, avanzar en pos de su propia política común de Defensa y Seguridad, que impulsó en la Comisión Europea y en el Consejo de la UE Josep Borrell.
El que, todavía podría jugar algún papel en la crisis del PSOE en pos de su recuperación democrática y constitucional. Un Borrell que el miércoles volvió a insistir en la necesidad de una Europa de la Defensa y la Seguridad en el discurso de su ingreso en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, en un acto que presidió el Rey Felipe VI y que convocó a muchos de los protagonistas de la ahora vilipendiada Transición.