Miquel Escudero-El Correo
Hace ahora medio siglo que el joven Jaume Sisa compuso la maravillosa canción ‘Qualsevol nit pot sortir el sol’ (Cualquier noche puede salir el sol). En ella daba la bienvenida en su casa (en su mente, en su corazón) a entrañables personajes de ficción, en el deseo de que la impregnaran de colores y de perfumes, la reanimaran y le dieran vida. Entre los invitados: Blancanieves, Pulgarcito, los tres cerditos, Snoopy, Simbad el marino, Alí Babá y Gulliver, Frankenstein, Pinocho, Tarzán y Peter Pan. Pero también personajes de tebeo como el Pato Donald, Superman, Jaimito, Doña Urraca, Roberto Alcázar y Pedrín, Carpanta, la familia Ulises y el Capitán Trueno (en patinete). Y muchos otros también, en una recitación que dura más de cinco minutos. Así, hasta que el cantautor concluye que «no falta nadie, o quizá sí: faltas tú».
Quien le escucha, cualquiera de nosotros, también está invitado a su casa, hay sitio para todos. «También puedes venir tú, si quieres. Te esperamos», dice en nombre de todos los ya reunidos. Algo tan milagroso como que cualquier noche pueda salir el Sol. Por esto, «mi casa es vuestra casa, si es que hay casas de alguien». Un catalán generoso, alejado del estereotipo y molde nacionalista y próximo a ordenar la realidad según el modelo de la galaxia.
Sisa rechazó el ‘procés’, pues un país libre es «una comunión responsable de hombres que se sienten libres, no la instauración de un Estado»; hay Estados independientes cuyos países no son libres. Ha dicho que aún no sabe lo que quiso decir con esta canción. Yo veo un sueño de ilusión y cariño con los personajes de la infancia, que es la patria que a todos integra.