Beatriz Jiménez-Vozpópuli
- El importe total destinado a toda España para las medidas relacionadas con incendios forestales asciende a 221 millones
España destina a la prevención de incendios 26 euros por cada 100 euros que invierten otros países como Grecia o Portugal. Concretamente, el Gobierno de Pedro Sánchez destinó 221 millones de la partida de fondos europeos para las medidas relacionadas con incendios forestales, lejos de las cantidades destinadas por otros países con el mismo nivel de riesgo que España.
Así se extrae del Informe Especial 16/2025: Financiación de la UE para luchar contra los incendios forestales elaborado por el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea, que analiza la manera en que los Estados miembros hicieron uso de la financiación de la UE para abordar la prevención, la preparación y la restauración frente a los incendios forestales. El análisis de los auditores europeos se centra en Grecia, España, Polonia y Portugal, al considerar «su elevado riesgo de incendio forestal y la importante inversión de la UE» Estas partidas económicas proceden del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, un instrumento temporal que vincula la financiación de la UE a las reformas e inversiones de los Estados miembros a partir del 1 de febrero de 2020, con la opción de desembolso hasta el 31 de diciembre de 2026.
Según los datos analizados por el Tribunal de Cuentas Europeo, Portugal y Grecia han asignado importes significativos para medidas relativas a los incendios forestales –615 millones de euros y 837 millones de euros, respectivamente–. Por el contrario, el importe total destinado a toda España para las medidas relacionadas con incendios forestales en el marco del MRR asciende a 221 millones de euros. Es decir, que de media España ha destinado 500 millones menos que dichos países mediterráneos.
Además de las cuantías, el organismo europeo también señalaba algunas deficiencias a la hora de elegir los proyectos a financiar. Este proceso de selección debería garantizar que la ayuda se canalice hacia los proyectos que mejor respondan a las necesidades identificadas y que estén dirigidos a lograr los mejores resultados en la protección frente a los incendios forestales.
“Anteriormente, las normas de la UE establecían que solo las zonas forestales que hubieran sido clasificadas en las categorías de medio a alto riesgo de incendio podían optar a ayudas relacionadas con la prevención de incendios forestales. La Comisión ha suprimido estos requisitos para el período 2023-2027. Sin embargo, algunos Estados miembros, como España siguen aplicando este criterio de admisibilidad para orientar la ayuda. Además, el requisito se utiliza con frecuencia como criterio de selección”, reza el informe publicado el pasado mes de junio.
Asimismo, el Tribunal considera que las partidas deben centrarse en proyectos que garanticen la sostenibilidad de las medidas en casos como el mantenimiento de cortafuegos o el desbroce de la vegetación, tareas que requieren trabajo y financiación regulares. En este punto, señala el ejemplo de Galicia al indicar que la sostenibilidad a largo plazo de las acciones financiadas no está garantizada. «En Galicia, los cortafuegos deben mantenerse cada tres años; sin embargo, en 2024, las autoridades tenían previsto efectuar trabajos en menos de un tercio de todos los cortafuegos existentes», apunta el informe.
Los auditores europeos inciden en que las operaciones que impliquen inversiones en infraestructuras deben estar activas durante los cinco años siguientes al pago final de los fondos europeas y pone el caso de la creación de cortafuegos o la retirada de material combustible, acciones que «requieren un trabajo continuo y financiación cada tres o cuatro años, en función de las condiciones climáticas».
Incremento de los incendios
El fuego ha quemado 39.155,13 hectáreas en toda España hasta el 3 de agosto, un 9% más que en 2024, cuando ardieron hasta esa misma fecha 35.603,79 hectáreas. Los datos, en todo caso, no incluyen los devastadores incendios que ahora mismo están arrasando zonas de León, Tarifa, Ourense y Tres Cantos (Madrid).
La mayoría de estas hectáreas forestales se quemaron durante el mes de julio, cuando se registró la cifra de incendios más alta desde marzo de 2023. Además, en lo que va de agosto ya se han quemado más de 16.000 hectáreas de arbolado. Ahora bien, un análisis de la situación de los incendios con más perspectiva muestra que 2025 está lejos de los récords de 2022 y 2012 para esta época del año.
La situación es, incluso, más grave si se comparan los datos del MITECO con los del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS). Según este organismo internacional, el fuego ya ha quemado este año más bosque de todo el que quemó en 2024: 60.000 hectáreas abrasadas en menos de ocho meses, una cifra que ya supera las 47.711 reportadas por el Ministerio para la Transición Ecológica en su balance total del año pasado.