Ramón Pérez-Maura-El Debate
  • Zapatero puso las primeras piedras para acabar con el espíritu de la Transición y yo creo que esa etapa de nuestra política debe ser reivindicada. Y más en esta hora desgraciada

En los últimos días hemos tenido varias reivindicaciones de la Transición. Un momento cumbre de nuestra historia donde la izquierda y la derecha se dieron la mano y miraron al frente. Algo que ahora no quiere de ninguna manera nuestro Gobierno cuyo objetivo es polarizar España.

He leído en estos días un libro que he disfrutado mucho, Memorias de anteayer. De cómo una generación refundó el centroderecha español y llevó el PP al Gobierno. El autor es mi buen amigo Federico Trillo. Él me describe en el texto como «amigo fraternal» y yo lo ratifico. Son unas memorias en las que se cuentan muchos detalles que no forman parte de la gran historia, pero que ayudan a comprenderla. Describe su relación con su padre que le enseñó que en la política hay que estar preparado para saber irse y le decía que «la política embrutece, a muchos envilece y nadie te lo agradece». Lo que nos cuenta Trillo es la dura labor de crear un centro derecha unificado como única forma para desalojar al socialismo de Felipe González del poder. Y ese entendimiento es el que reivindica hoy entre PP y Vox. Y ahora que vengan a decirme que Trillo y los socialistas son la misma cosa. Explica el autor cómo la primera sucesión de Fraga por Antonio Hernández Mancha no funcionó y después no fue tan fácil convencer a Fraga de que el hombre era Aznar. En toda esa operación, Trillo jugó un papel esencial y por eso durante los años de Aznar tuvo papeles tan relevantes como presidente de las Cortes y ministro de Defensa.

En estos días se ha estrenado una serie de televisión de cuatro capítulos de una hora bajo el nombre de «La última llamada». Cada capítulo es un reportaje de una hora con cada uno de los expresidentes del Gobierno vivos y su entorno. Dirige la serie el periodista Álvaro de Cózar y queda claro que ha intentado hacer una reivindicación de cada uno de los presidentes desde el punto de vista que tienen ellos de sí mismos. Yo creo que ninguno queda mal. Pero, al final, no hay manera de salvar la posición de José Luis Rodríguez Zapatero. Y ya comprenderán que tampoco me da ninguna pena. Porque Zapatero puso las primeras piedras para acabar con el espíritu de la Transición y yo creo que esa etapa de nuestra política debe ser reivindicada. Y más en esta hora desgraciada.

Pero ha habido una cosa más y muy reveladora. Esta semana el Rey ha otorgado el collar de la Orden del Toisón de Oro a Felipe González, Miguel Herrero y Miguel Roca. Muerto Adolfo Suárez no quedan tres personalidades que encarnen mejor el espíritu de la Transición. Y por eso creo que podemos decir que es ese momento histórico el que se está reivindicando con este honor que el Rey ha hecho a nuestros veteranos políticos.

La Transición soporta hoy ataques desde la izquierda y la derecha. Aunque sin duda son mucho más agresivos los de la izquierda. No estaría de menos reflexionar un poco sobre tanta radicalidad.