«Tengo siempre presente que es un mal irreparable. Pido perdón de todo corazón»

DIARIO VASCO, 30/6/12

El exdirigente etarra ‘Txelis’ asume la responsabilidad moral hacia las víctimas en una carta leída en la UPV. Afirma en la misiva que «Dios es testigo de que estoy profunda y sinceramente arrepentido»

«Habiendo sido durante años militante de ETA soy plenamente consciente de la responsabilidad moral que ello conlleva para con las numerosas víctimas que ha generado ETA a lo largo de su historia». «Tengo siempre presente que es un mal irreparable». «Dios es testigo de que estoy profunda y sinceramente arrepentido». Éstos son tres ejemplos de las contundentes frases que recoge la carta de petición de perdón del exdirigente etarra José Luis Álvarez Santacristina, ‘Txelis’, que fue leída ayer en los Cursos de Verano de la UPV por el catedrático emérito de Psicología social Sabino Ayestarán, en el curso que dirige bajo el título ‘Perdonar para vivir’. La misiva había levantado una amplia expectación mediática, y periodistas y cámaras llenaron junto con los alumnos del seminario una de las mayores salas del donostiarra Palacio de Miramar.

El exdirigente de ETA iba a participar en el acto, invitado por el propio Ayestarán. Éste explicó, antes de leer la carta, que la dirección de la prisión de Martutene sí había autorizado que el exdirigente etarra acudiera al curso, pero que debido a las protestas de algunos colectivos de víctimas del terrorismo, una vez que los medios de comunicación publicaron la noticia en mayo, fue cuando instituciones penitenciarias se echó para atrás» y pidió a ‘Txelis’ que «se retirara», y él «aceptó para no herir la sensibilidad de las víctimas». Ayestarán denunció que prohibir pedir perdón públicamente es «ir en contra del derecho básico de cualquier persona».

‘Txelis’ escribió la misiva desde la cárcel de Martutene, donde cumple condena en segundo grado, por lo que desde octubre de 2010 sale varias horas al día de prisión, excepto los fines de semana, para trabajar en un centro de educación de Irun. La misiva está datada el pasado día 24 y en seis páginas y media realiza una larga reflexión autocrítica y un exhaustivo análisis sobre el perdón, privado y público.

Con su misiva, Álvarez Santacristina se convirtió ayer en el primer exdirigente de ETA que pide perdón públicamente a las víctimas, y lo hizo advirtiendo a los que quieran seguir su paso de que «para ser auténtico y reparador» ha de pedirse «sin excusas» de manera sincera y, «sobre todo, desde el sufrimiento de las víctimas».

Su iniciativa, ocho meses después del cese definitivo de la violencia de ETA, se produce en un contexto en el que la izquierda abertzale todavía se muestra reticente a pedir perdón a las víctimas y reconocer su responsabilidad por el daño y dolor causados por el terrorismo, como se le exige desde diferentes estamentos políticos. Asimismo, la carta llega cuando es cada vez más patente la división dentro de los reclusos de ETA, entre los que respaldan la denominada vía Nanclares y los que siguen dentro del Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK), fiel a las directrices de la organización.

Con el objetivo de expresar «de modo sintético» su posición, ‘Txelis’ propone en su escrito siete «criterios básicos», en los que destaca que «pedir perdón es un acto de humildad y no pocas veces de valentía». Manifiesta que «es un ejercicio de libertad que no es en modo alguno un acto de exigencia para con la víctima o sus familiares», aunque solicita a éstos que le «escuchen». Expresa, asimismo, que la petición «no espera necesariamente, y menos aún en primer término, que se le otorgue el perdón por parte de la víctima o sus familiares, y no obliga a éstos, aunque remarca que puede ser entendido «como una oportunidad para que la memoria del daño irreparable sufrido se asiente definitivamente», y también «para avanzar en la labor de duelo». Se trata de una forma de abordar el tema de las víctimas inusual por parte de un exetarra.

Además, considera en su escrito que la petición de perdón podría quedar «desnaturalizada y perder su potente fuerza reparadora y regeneradora» si se planteara solo como un «requisito de cumplimiento formal», en referencia a la exigencia que el Ministerio del Interior impone a los reclusos de ETA para acceder a beneficios penitenciarios. No obstante, el exetarra reconoce que «determinadas circunstancias sociales y personales» pueden «favorecer un proceso de reflexión autocrítica y empática» que desemboque en su momento en una «libre petición de perdón».

Enseñanza de Jesús

‘Txelis’ también subraya la violencia de «intencionalidad política», expresión que atribuye al obispo emérito de San Sebastián, José María Setién. Precisamente, como muestra de su licenciatura en Filosofía y Teología y la conversión religiosa que ha vivido tras su encarcelamiento, utiliza frases como «Jesús de Nazaret enseñó ‘la verdad os hará libres’» y que « Dios es testigo que estoy profunda y sinceramente arrepentido».

La lectura de la carta por parte de Ayestarán finalizó con aplausos por parte de los participantes en el curso, y a continuación se celebró una mesa redonda en la que tomaron parte el propio catedrático, el periodista Mariano Ferrer y el profesor de la Universidad Pontificia de Salamanca Xabier Pikaza.

‘Txelis’, nacido en San Sebastián en 1953, fue detenido en 1992 en la operación de Bidart contra la cúpula de ETA. Fue condenado en Francia a 10 años de prisión, aunque, tras su extradición a España en 1997, fue sometido a tres juicios por los que se le impusieron condenas que suman 90 años de prisión. Considerado jefe del aparato político de la banda, fue expulsado de la misma en 1998 tras renunciar a las actividades terroristas, expresar su arrepentimiento y reclamar el abandono de las armas. También fue rechazado por el colectivo de presos etarras en 2008 cuando por su proceso de reinserción.

DIARIO VASCO, 30/6/12