El preso disidente de ETA Urrosolo Sistiaga disfruta en Gipuzkoa de su primer permiso

EL CORREO 30/07/13

Pasó el fin de semana con su familia y su actual pareja, la también representante de la ‘vía Nanclares’ Carmen Gisasola

Joseba Urrosolo Sistiaga, referente del grupo de presos disidentes de ETA enmarcados en la denominada ‘vía Nanclares’, ha disfrutado durante este fin de semana de su primer permiso penitenciario ordinario. Han sido tres días, que ha pasado en Gipuzkoa junto a su numerosa familia y a su compañera sentimental, la también exdirigente crítica con la banda Carmen Gisasola. La Audiencia Nacional avaló a mediados de julio la concesión de este permiso al recluso, y aceptó así la impugnación que Urrosolo había presentado contra la decisión primera del juez de Vigilancia Penitenciaria. En un principio, el juez José Luis Castro había negado su salida por considerar que la grave condena a 449 años de prisión, impuesta al exjefe del ‘comando Madrid’ por dieciséis asesinatos y dos secuestros, excedía las previsiones legales para otorgarle este beneficio, pese a su reconocido desmarque de ETA, incluso antes de ser encarcelado hace más de quince años.
La salida de prisión de Urrosolo, que ayer reingresó de nuevo en el centro penitenciario alavés de Zaballa, se produjo el pasado viernes. Según ha podido saber este periódico, Urrosolo ha permanecido estos tres días en Gipuzkoa, donde ha visitado a sus numerosos familiares, incluso algún nieto. Y, tras varios años de relación, ha coincidido por primera vez fuera de prisión con su compañera sentimental Carmen Gisasola, exmiembro también de ETA y cabeza visible igualmente del autodenominado ‘Colectivo de presos comprometidos con el irreversible proceso de paz’.
La fotografía que ilustra esta información, a la que ha tenido acceso este periódico, está datada ayer por la mañana en un lugar sin determinar de ese territorio y en ella, junto a la pareja, aparece también el preso crítico con la banda, Andoni Altza, con permiso para salir todos los días de la prisión de Martutene para trabajar.
Según las fuentes consultadas, Urrosolo ha permanecido, de forma discreta, los tres días en compañía de sus familiares. Y después de la controversia en torno a la concesión de su primer permiso, su círculo más cercano se ha mostrado agradecido por la argumentación expuesta en el auto favorable de la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia y por el hecho de que el juez no limitara geográficamente su salida, como ocurrió hace unas semanas con la de Valentín Lasarte, otro preso con cientos de años de condena, desmarcado de ETA, al que se le prohibió pisar la comunidad autónoma vasca para no estar cerca de sus víctimas.
«Factores de rehabilitación» El del pasado fin de semana es el primer permiso oficial concedido a Urrosolo Sistiaga desde que fuera detenido en Francia en 1997 y extraditado a España en 2002. Por diversos motivos familiares, se le otorgaron en su día dos licencias extraordinarias. En esta ocasión, la sala de la Audiencia Nacional que preside Fernando Grande Marlaska revocó la decisión del juez de Vigilancia Penitenciaria, y por unanimidad, decidió conceder tres días de libertad vigilada al exdirigente de ETA por considerar que cuenta con «factores muy relevantes de rehabilitación».
En el auto, la Sala de lo Penal esgrimió como argumento la «evolución muy positiva» que el exetarra ha protagonizado en prisión desde que se desmarcó de la violencia y reconoció el daño causado. El tribunal aludió a las repetidas declaraciones públicas de Urrosolo rechazando el uso de la violencia y posicionándose «en contra de la actividad terrorista».
Estos argumentos, sin embargo, no convencieron a algunas asociaciones de víctimas, como la AVT, crítica con las últimas decisiones de la sala presidida por Marlaska, que con la concesión de permisos como el de Urrosolo o Lasarte avala la llamada ‘vía Nanclares’ como camino para la «reinserción» de los reclusos que se han desmarcado de la violencia de ETA y han hecho autocrítica de su pasado. La AVT rechazó que se «venda» a estos presos como «ciudadanos ejemplares».