ERC rechaza debatir un nuevo modelo de financiación

EL MUNDO 16/08/13

· ERC cree que ya es tarde para calmar las reivindicaciones independentistas con una nueva financiación para Cataluña. De hecho, los republicanos no quieren ni entrar en ese debate porque una reforma significaría «que todo sigue igual». Así lo ilustró en una entrevista el portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, quien advirtió al Gobierno de que su partido no reclamará un nuevo modelo de financiación ni debatirá sobre ello porque «Cataluña quiere emanciparse, no ser tratada como menor de edad».

Para Bosch, si España y las comunidades autónomas necesitan un nuevo modelo, eso «deben decidirlo los españoles, no nos concierne», ya que a lo que aspiran en sus filas es a lograr «una república catalana soberana que se financie de forma independiente». Eso sí, «si se propone un sistema de financiación que signifique una mejora con respecto al actual y que aligere el ahogo financiero que sufre la Generalitat, no nos opondremos, pero no es nuestro objetivo». El suyo, según recalcó a Efe, es acabar con «la falta de soberanía económica», que considera que se traduce en que «a los catalanes no nos dejan ser mayores de edad ni gestionar el dinero de los impuestos que pagamos».

«Soberanía económica»

Según Bosch, mientras los catalanes no puedan emanciparse económica y políticamente, no podrán «resolver los problemas de la mejor forma posible para Cataluña», por lo que el objetivo ya no puede ser el de reformar. Algo que se ha hecho «durante 35 años» y no ha solucionado el principal problema: la «soberanía económica». Según él, «estamos convencidos de que no podemos salir del pozo si no tenemos plena independencia para resolver los problemas con nuestros propios recursos que, en todo caso, siempre serían muy superiores a los que tenemos ahora», señaló.

Según el portavoz de los republicanos en el Congreso, «lo que no puede ser es que, mientras no seamos mayores de edad», el Gobierno español quiera «quitar [a Cataluña] el plato de la mesa» y no permita la emancipación, como si se tratara de «un padre negándole ese derecho a su hijo». Tal y como abundó el portavoz republicano, esa actitud por parte del Gobierno central «no puede ser», porque demuestra «deslealtad», entre otros motivos porque el hijo aporta todos sus ingresos a las arcas familiares, que es lo que está haciendo Cataluña».

EL MUNDO 16/08/13