ABC – 23/07/15
· El presidente, varios ministros y la cúpula del PP responden con firmeza a la amenaza de los independentistas: «No se lo vamos a permitir».
En la jornada de ayer, el Gobierno y el Partido Popular pasaron a la ofensiva contra el desafío soberanista planteado por el presidente de la Generailtat de Cataluña, Artur Mas. Hasta tres ministros y los tres nuevos vicesecretarios del PP salieron todos a una a respaldar al presidente del Gobierno, que abordó el asunto desde Sevilla.
Sin estridencias, pero con máxima firmeza frente al discurso independentista de Mas y sus aliados, Rajoy advirtió ayer de que «en España, la ley se va a cumplir», un mensaje que acompaña con una advertencia: «Si alguien quiere violentarla, no se lo vamos a permitir».
En la respuesta de Rajoy ante la deriva de Mas no hay paños calientes ni más llamamientos al diálogo a quien solo quiere acabar con España. Lo que hay es un aviso claro de que aquí nadie va a incumplir la legalidad, y un mensaje de tranquilidad: «Cataluña no va a ser independiente», recalcó Rajoy de forma tajante, para quitar toda esperanza a los que quieren convertir las elecciones autonómicas del 27 de septiembre en una especie de plebiscito sobre la secesión.
Durante su intervención en un foro empresarial organizado por la Cámara de Comercio en Sevilla, Rajoy advirtió de los peligros y amenazas a los que se enfrenta la recuperación económica de España en el futuro inmediato. Y en primer lugar se refirió a «lo que pasa en Cataluña». Ese es el primer riesgo que tiene nuestro país, seguido, a su juicio, de los «cantos de sirena» de algunos y la delicada situación de Grecia, que nos ha dado muchas lecciones de lo que puede ocurrir cuando se hacen las cosas mal.
Desde que Mas decidió aprovechar la durísima crisis que atravesaba España para iniciar su desafío independentista, en 2012, el Gobierno de Rajoy optó por la prudencia, junto a una respuesta en ocasiones más jurídica y legal que política. Pero con el último giro que ha dado la situación, con las elecciones del 27-S a la vuelta de la esquina, el mensaje desde La Moncloa se ha hecho más rotundo. «Voy a defender el núcleo fundamental de la Constitución, porque creo en ella y porque es mi obligación», advirtió Rajoy. «Voy a defender la ley, fuera de ella nada es posible». En su discurso, dejó claro que el Gobierno va a parar en seco cualquier paso que den los independentistas y que suponga una violación de la ley.
Frente al «ataque frontal» a la ley y la división que quieren llevar a cabo los independentistas, Rajoy defendió otra postura radicalmente diferente: «Vamos a apostar por la estabilidad y la certidumbre, por una Cataluña española y europea, dentro y no fuera de la Unión Europea. Vamos a defender que nadie tenga que renunciar a su condición de catalanes, españoles y europeos. Vamos a defender nuestra historia, lo que nos une y vamos a dar la batalla para estar dentro del mundo, que cada vez tiene menos barreras y fronteras. No estamos de acuerdo con quienes quieren romper lo que lleva siglos unido».
Vicesecretarios, todos a una
El discurso del presidente del Gobierno tuvo continuidad desde el partido y el Ejecutivo. El titular de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, advirtió a Mas que «saltarse las reglas del juego conduce a la arbitrariedad o a la dictadura» y le pidió «volver a la racionalidad». Insistió el ministro en que ha sido una comunidad privilegiada y advirtió del riesgo para Cataluña de una declaración unilateral de independencia, porque tendría que ser reconocida por Naciones Unidas, cosa que no sería fácil como les ocurre a muchos estados que aún no lo han sido, informa Luis Ayllón.
Por su parte, el titular de Industria, José Manuel Soria, aseguró que la actual situación de Cataluña «es fruto de una profunda irresponsabilidad». Rafael Catalá, ministro de Justicia, fue incluso más contundente al considerar que es «imposible» una declaración unilateral de independencia en Cataluña tras el 27-S. Además, recordó que el artículo 155 de la Constitución que permite suspender la autonomía «está plenamente en vigor».
La vicesecretaria de Estudios del PP, Andrea Levy, negó que en Cataluña haya un «choque de trenes», y explicó que lo que sucede es que el presidente catalán, Artur Mas, «ha descarrilado» con su apuesta secesionista, y lamentó que el PSC y Ciudadanos no se comprometan con la posibilidad de apoyar una moción de censura.
ABC – 23/07/15