EL CONFIDENCIAL 08/10/15
La política catalana suma y sigue. Junts Pel Sí no está dispuesta a ceder ante la CUP: Artur Mas es su candidato a presidente, y si sus socios no le quieren votar, deberán ir otra vez a las urnas
Las negociaciones para formar gobierno en Cataluña están en una fase crítica. Así lo han manifestado diversas fuentes consultadas por El Confidencial. Una de ellas afirma incluso que “en la cúpula de Junts Pel Sí se habla ya de que se tendrán que convocar nuevas elecciones para el mes de febrero, porque va a ser imposible que se obtenga el apoyo parlamentario para facilitar la investidura de Artur Mas”. Para Junts Pel Sí, la figura del ‘president’ es irrenunciable, y si no se le apoya, se rompe la baraja y se amenaza con ir a las urnas otra vez.
Los representantes de Junts Pel Sí (candidatura que integra a Convergència Democràtica de Catalunya, Esquerra Republicana, la Asamblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural) tratan de llegar a alguna entente con la Coordinadora d’Unitat Popular (CUP) para poder investir a Mas como presidente, que era el principal acuerdo al que habían llegado los dos grandes partidos catalanes antes de confeccionar la lista unitaria de Junts Pel Sí.
En la candidatura de Mas se quejan de que no tienen un interlocutor válido en la CUP. “Cada día salen dirigentes de la CUP diciendo cosas que entran muchas veces en contradicción con las que han dicho otros dirigentes. Suponemos que es lo que tiene ser un partido asambleario. Lo malo, pues, es no tener a alguien con quien negociar.¿Con quién hemos de pactar? ¿Con Antonio Baños? ¿Con Josep Manel Busqueta? ¿Con otros dirigentes? ¿Con la asamblea?”, se lamentan fuentes de Junts Pel Sí.
La versión de la CUP
Desde la organización radical, en cambio, afirman que sus rivales “se enrocan al proponer a Artur Mas como candidato, cuando saben que tenemos el mandato democrático de votar en contra. Ya les hemos dicho por activa y por pasiva si quieren un proyecto de país, o de un señor que lo que quiere es salvar su pescuezo”, resumen gráficamente.
Los representantes de Junts Pel Sí, por su parte, afirman que “si no ceden y se enrocan en sus posiciones, no quedará más remedio que ir a otras elecciones en el mes de febrero”. A simple vista, unas nuevas elecciones serían un fracaso mayúsculo de la política catalana: en tiempos de Mas, se habría ido a cuatro elecciones en solo cinco años, lo que no dejaría de ser una burla a los ciudadanos. Sin embargo, desde las filas de Convergència las cuentas que se hacen son otras: “Para esas fechas, mucha gente se habrá dado cuenta de la necesidad del voto útil a Junts Pel Sí. Y buena parte de los más de 100.000 votos que ERC prestó a la CUP en estas elecciones volverá a nosotros, con lo que entonces sí podremos obtener la mayoría absoluta”. Es la reflexión que hace a este diario un alto cargo de CDC.
La CUP, por su parte, celebrará una conferencia política hoy de la que puede salir una propuesta definitiva sobre el posicionamiento de la formación. Aunque, en principio, la asamblea ha ordenado votar contra la investidura de Mas, algunos dirigentes han dejado entrever que, “por responsabilidad”, su partido “no hará descarrilar el proceso”. En otras palabras, que dejan la puerta abierta a la abstención en la investidura e incluso en facilitarla para que pueda formarse un Gobierno que tire adelante con el proceso de independencia.
Todo estaba pactado… menos Mas
Claro que, según fuentes consultadas, todo se puede venir abajo con la presencia de Artur Mas. “La candidatura ya está pactada de antemano con ERC. Es más: se preveía que Oriol Junqueras, presidente de Esquerra, sería el próximo presidente del Parlamento. Las dos vicepresidencias del Gobierno serían para Marta Rovira [secretaria general de ERC] y para Neus Munté [que actualmente ya ocupa la vicepresidencia]. Para el cabeza de lista, Raül Romeva, se había pensado en Exteriores, porque es un terreno donde luce mucho y que conoce muy bien, pero posiblemente se le ofrezca encabezar de nuevo la candidatura al Congreso de los Diputados en diciembre.
Aquí, quien sale perdiendo es el actual consejero de Presidencia, Francesc Homs, que había previsto encabezar él esa lista. Además, se había hablado de «dos macroconsejerías del ámbito económico: una, puramente de Economía, que englobase también todo el tema de universidades e investigación; otra, de Hacienda, para escenificar la importancia de la construcción de la Hacienda catalana”, dicen a El Confidencial fuentes de Junts Pel Sí.