Dos visionarios

SANTIAGO GONZÁLEZ – EL MUNDO – 15/01/16

Santiago González
Santiago González

· El pasado lunes,El Periódico de Catalunya publicaba una columna de su responsable del área de Contenidos Digitales, Saül Gordillo, en la que hacía una impresionante hagiografía, eso que en el argot del oficio viene a llamarse «un pijama de saliva», al flamante presidente de la Generalidad, investido en el Parlamento de Cataluña unas horas antes.

Gordillo es socio de Puigdemont en una empresa de Comunicación, Doble Utopía, que el honorable montó en 2006. Aunque la empresa dejó de tener actividad en 2008 no se ha disuelto formalmente. Doble Utopía, dos visionarios, contó con el generoso maná de las subvenciones, de las que se benefició durante los años de actividad real de la empresa, aunque no tanto como la publicación que fundó en 2004, Catalonia Today, en la que colocó aquel mismo año a quien sería después su mujer y directora del invento, Marcela Topor, una joven actriz rumana que lo había deslumbrado. El grupo editor de Catalonia Today ha recibido 12,3 millones de euros en subvenciones entre 2008 y 2014.

Un visionario con capacidad de seducción titulaba Gordillo su perfil de Puigdemont en El Periódico: «A diferencia de Artur Mas, el nuevo president es un activista, un intelectual, un emprendedor, un periodista inquieto…». No sé yo cómo se tomará esto la biógrafa Rahola, pero el periodismo es anticiparse y él escribió antes de que terminara la sesión de investidura.

El retrato termina con broche magistral: «Puigdemont ha llegado a la Presidencia cuando nadie lo esperaba, en otra demostración de su capacidad para preveer (sic) y anticiparse». En preveyendo, cualquiera. El esfuerzo fue justamente recompensado: al día siguiente era nombrado director de Catalunya Ràdio, cargo que se encontraba vacante desde que el verano pasado la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) fumigó a su director, Félix Riera, que había sido puesto allí por el lado equivocado de la coalición, Unió. Para guardar las formas, han nombrado a Gordillo a petición de Esquerra, hay que ver.

No es que en Euskadi no se hayan visto cosas parecidas, aunque todo nacionalista sueña con editoriales conjuntos y el PNV haya hecho estos masajes en la prensa del partido. La misma semana de septiembre del 98 en que se formalizó el pacto de Lizarra, Deia publicó una entrevista con Arzalluz, que empezaba así: «No abundan los políticos con talla de estadistas como para que el mundo se permita el lujo de que alguno no cuente siquiera con Estado propio».

Una periodista entregada veía la llegada del libertador en los anuncios telúricos de la madre naturaleza. Así lo contaba en la revista Euskadi: «Nació el mismo día que su pueblo natal, Azkoitia, hubo una gran inundación… Las aguas desbordadas y salvajes lo ocuparon todo mientras él surgía a la vida con pujante desafío». Después recuerda «los monótonos e interminables rezos de su pueblo levítico, el trasfondo salmódico de las avemarías que brotaban del fondo de las fábricas, de los talleres artesanos, de lo más íntimo de la vida familiar». Nos esperan momentos de exaltación y gloria, amén.

SANTIAGO GONZÁLEZ – EL MUNDO – 15/01/16