Mes bueno, con malos datos

IGNACIO MARCO-GARDOQUI-EL CORREO

Las bajas a la Seguridad Social en enero se elevaron a las 253.900 y las altas se quedaron en 124.900, lo que arroja una destrucción de empleo de 129.000 puestos y nos vuelve a colocar por debajo de los 20 millones de afiliados. Aun así, fue un buen mes para el empleo. Para llegar a esa conclusión solo hace falta abandonar los datos absolutos, fijarnos en los relativos y compararlos con los obtenidos en otros meses de enero anteriores. Es lo que tiene esto de analizar los datos mes a mes. La estructura económica del país y los hábitos de consumo de todos nosotros hacen que unos meses estén beneficiados de salida, las navidades por las compras y los meses de verano por el efecto de las vacaciones y el consiguiente aumento de la movilidad y el consumo. Mientras que los meses siguientes acostumbran a darnos disgustos, al menos temporales.

Ya sabe también que seguimos con 227.900 trabajadores afiliados con actividad limitada, ausentes de las estadísticas; y que servicios de estudios como el del BBVA calculan que, en ausencia del covid, el número de ocupados debería ser superior a los 20,1 millones, lo que eleva el impacto de la pandemia a 484.000 puestos de trabajo. Una barbaridad que ha sido paliada con el incremento del empleo público, que veremos cómo evoluciona cuando se dé por terminada la enfermedad. Algo que, a la vista de las declaraciones efectuadas por los gobernantes, parece que ocurrirá antes en los despachos de los políticos que en las salas de urgencia de los hospitales.

Lo que sí resultan asombrosas son las declaraciones de la vicepresidenta segunda del Gobierno -no solo de ella-, que confirman los efectos taumatúrgicos de la reforma laboral sobre la estabilidad del empleo. Una reforma que, en principio, se aprueba hoy y que solo con su publicación en el BOE ya ha mejorado los porcentajes del empleo estable; y eso que las empresas disponen de tres meses para acomodarse completamente a ella. No me dirán que no es milagroso. Una reforma, también, de la que abominan por exceso el PP, Vox y una parte no despreciable de la patronal y, por defecto, otra buena parte del combo que apoya al Gobierno en el que encontramos a partidos tan dispares ¿o no? como ERC, Bildu, JuntsXCat, la CUP y el PNV.

Le aconsejo que esté atento al debate que se celebra hoy en el Parlamento, pues seguro que nos proporciona grandes momentos y no pocas sorpresas. No sé si será enriquecedor, pero seguro que es entretenido…