Javier Elorrieta- Editores
Hace unos días indiqué la curiosidad de que 9 de los 13 artículos recogidos en la página de artículos de opinión de la Fundación para la Libertad estaban escritos por personas que estuvieron en el entorno del PSOE. Algunos de ellos previamente en el entorno del PCE y organizaciones de más acentuada radicalidad izquierdista. Pero que habían evolucionado . Y que al no ser impermeables a los datos, a los argumentos de la razón y la realidad, eran sumamente críticos con el PSOE de Zp y de Sánchez.
Hace una temporada escuché la valoración de Ignacio Varela, quien estuvo en el cogollo del equipo de Felipe González, explicar que el PSOE no era un Partido de 150 años de antigüedad. Que la realidad es que una misma sigla había arrastrado 5 partidos diferentes.
Hoy el panorama político de regresión de derechos y bienestar general, ya tasado e indisimulable, sobre todo en los países de Hispanoamérica está tasado y es indisimulable. Es la prueba inocultable, en los tiempos de internet, de que las políticas estimuladas por la denominada «izquierda» son un desastre sin paliativos. El corredor de emigraciones masiva desde Colombia y Venezuela hacia EE.UU lo testifica . La creciente emigración de Argentina, Chile y Perú, y los anteriormente citados, hacia Europa, a España en concreto.
Pero en España el problema está creciendo y los propios emigrantes hispanos avisan de lo que a ellos les pasó. En Chile desde que Boric es presidente la caída de riqueza de las familias chilenas está en el «top» de los informes de diferentes organismos. En Cuba la huida de ciudadanos es masiva, sólo en EE.UU han entrado en lo que va de año 200.000 personas.
No hay ningún dato medible que libre a las políticas denominadas de «izquierda» de ser calificadas muy negativamente. En el ADN de la izda. no está en eliminar la pobreza, sino en gestionarla. No está en sus presupuestos acabar con ella, quieren acabar con la riqueza. La estabilidad de un país está en la gestación de una clase media amplia y movible. La depauperzación de la misma para asentar resortes estatales conlleva todo lo peor para la estabilidad, libertad y bienestar de una sociedad.
Cuando en una sociedad se presenta como un alarde positivo el incremento presupuestario constante de los fondos para las denominadas políticas sociales está gestando su propia decadencia.
La prueba del algodón más sencilla (nota del editor: la prueba del algodón siempre es sencilla) es comprobar, e invito a hacerlo, que sólo por el hecho de que la llamada izquierda acceda al poder de gestión de los recursos públicos, para que en el marco comparativo se pierdan posiciones . Pasa en los países, en todos, donde gobierna la izquierda. más radical, incluso pasa en España en sus autonomías.
Nota final. No se pierdan el resto de artículos, aunque destaque el de Xavier Pericay.
Si pueden no se pierdan la entrevista de Federico Jiménez Losantos a Axel Kaiser. Y la entrevista a Isabel Díaz Ayuso en Espejo Público de Antena 3. Y luego comparen, sin ir más lejos, con las intervenciones públicas de Pedro Sánchez. Por ejemplo