José Antonio Navas, ABC, 10/6/11
Zapatero no va a culminar el proceso de regeneración económica que necesita el país
Cantaba Joan Manuel Serrat aquello de las reformas que nunca se acaban y a fe que los tiempos han terminado por darle la razón. Después del decreto de negociación colectiva que hoy aprobará el Consejo de Ministros está muy claro que Zapatero no va a culminar el proceso de regeneración económica que necesita el país. Así lo han entendido los mercados, que han situado la prima de riesgo de la deuda pública por donde solía, más allá de los 240 puntos sobre el bono alemán. A ello se une la amenaza del desfase fiscal en las cuentas públicas de las comunidades autónomas y las dificultades inmanentes para lograr el más difícil, todavía, que supone cuadrar el futuro Presupuesto del Estado para 2012.
El panorama es cada vez más desalentador y la Comisión Europea ha vuelto a girar la tuerca con nuevos requerimientos que sólo sirven para poner en evidencia a un Gobierno que está muy pasado de rosca. Nuestros vecinos comunitarios no se creen ni por asomo la política económica de España y volverán a exigir mayores sacrificios, tanto más dolorosos cuanto más tiempo se tarde en llevarlos a cabo. El problema es que Zapatero ni siente ni padece y las autoridades de Bruselas empiezan a desconfiar incluso de Serrat. A decir verdad, las reformas de las que tanto se habla no sólo no se han terminado; en realidad, en muchos casos ni siquiera han empezado todavía.
José Antonio Navas, ABC, 10/6/11