Entre ese más de un millar de militantes adheridos a este proyecto figuran cargos públicos del partido, como diputados o concejales… cuyos nombres prefirieron no revelar. ¿El motivo? El miedo, explicaron desde este grupo de trabajo. «Sobre Ciudadanos hay una sombra de miedo estructural. Hay muchos compañeros que tienen miedo. Por ejemplo, en determinados momentos a algunos se les ha abierto un expediente de expulsión por manifestar su opinión. Nuestro proyecto busca romper con esto», expuso José María del Romero, uno de los promotores de este grupo, que ha visitado las agrupaciones de casi todas las comunidades para sumar adeptos a su causa.
SIETE COMUNICADOS
Desde el pasado abril, este colectivo ha hecho llegar a la Ejecutiva de Ciudadanos un total de siete comunicados, en los que exponen sus planteamientos y donde, entre otras exigencias, piden una defensa del «proyecto político de regeneración», una «coherencia entre el ideario y el día a día», la «garantía de los derechos de los afiliados» o «el fortalecimiento de la democracia y la transparencia internas» en los procesos de elección. Por ejemplo, como publicó este diario, frente a la petición de Albert Rivera de una ley electoral con listas abiertas y desbloqueadas –que es también una exigencia al resto de partidos–, Ciudadanos impone listas cerradas, conocidas como listas plancha, para la elección de la Ejecutiva en la próxima Asamblea General de principios de febrero.
TranC’sparencia, que no ha obtenido respuesta de la Ejecutiva de Ciudadanos a ninguno de sus comunicados reivindicando el cumplimiento interno de su ideario, concreta tres grandes defectos del partido de Rivera a nivel orgánico: ausencia de igualdad de oportunidades –Rivera tiene tres meses para hacer campaña para renovar como presidente del partido, mientras un afiliado sólo cuenta con tres días, exponen–; voto telemático –consideran que no se efectúa con las suficientes garantías como para que sea válido y que la Fábrica de Moneda y Timbre no audita el proceso, como sí defiende la dirección, sino que sólo valida que un día a una hora se ha emitido un voto, pero no de quién–; y, por último, falta de contrapeso y control del partido –estiman que la Comisión de Garantías y el Consejo General no fiscalizan la labor de la Ejecutiva–.
Este colectivo no va a presentar una candidatura para rivalizar con Rivera por la Presidencia de Ciudadanos en la Asamblea General que se celebrará el 4 y 5 de febrero, pero sí va a proponer candidatos para formar parte tanto de la Comisión de Garantías como del Consejo General. Sus promotores apuntan que están en condiciones de presentar compromisarios por casi todas las comunidades. «Coherencia entre el ideario y el funcionamiento interno» es la frase que más repiten.