Editorial, EL MUNDO, 27/6/12
EL PORTAVOZ de Amaiur en el Congreso, Mikel Errekondo, declaró ayer que la detención de dos etarras en Francia supone «un paso» del Gobierno «en la dirección contraria a la resolución del conflicto vasco». Se da la circunstancia de que uno de los dos detenidos es Ugaitz Errazkin, al que se le acusa del asesinato del socialista Isaías Carrasco y del empresario Ignacio Uría. Las palabras de Errekondo son intolerables porque equivalen a justificar los crímenes de ETA. ¿Cómo se puede decir que no dejar impunes los asesinatos es ir «en dirección contraria» a un supuesto proceso de paz? Estas palabras demuestran que Amaiur no ha cortado sus lazos con ETA y que sigue amparando el terrorismo. Ningún partido demócrata se expresaría en esos términos. Alfonso Alonso, portavoz del PP en el Congreso, repudió las palabras de Errekondo y afirmó que «el contador de la ilegalizacion» de Sortu y de otras organizaciones de la izquierda abertzale «ha empezado avanzar». Citó también la subvención del Ayuntamiento de San Sebastián a una película que exalta a ETA. El Gobierno tiene que empezar a tomar nota de estas actitudes, que podrían llevar a una nueva ilegalización que el propio Constitucional contempla en su reciente sentencia si la izquierda abertzale sigue por ese camino.
Editorial, EL MUNDO, 27/6/12