EL MUNDO – 24/02/16 – F. JIMÉNEZ LOSANTOS
· Lo que han hecho PSOE y Ciudadanos no es formar Gobierno pero sí coger sitio o algo que en baloncesto es fundamental: «tomar posición» y «asegurar el rebote». Después del acierto del tirador, lo más importante es que, si da en la tabla o el aro y no entra, pueda recuperar la pelota bajo el aro el pívot, gigantón al que sólo Carmena puede creer que le hace falta un recogedor de colillas. Aún se está recuperando del regalito Felipe Reyes, que, como la mayoría de jugadores de élite, no fuma.
Los que sí estarán fumando en pipa tras el preacuerdo escenificado ayer por Rivera y Snchz serán Caballo Loco y Toro Sentado, también conocidos como Coleta Morada y Arroyo Seco. Porque, aunque los grandes jefes de chiricauas y cheyennes voten no en la próxima asamblea o votación a la luz de la luna, el sioux Cara de Palo, también llamado Poste Tieso, y el creek Nube Rosada, antiguamente conocido como Vientecillo del Este, han tomado la posición en la bombilla, han cogido sitio y esperan el rebote que en la segunda votación de investidura o en los tambores electorales del 29 de junio pueden llevarles a atrapar la pelota, encestar y ganar el Partido.
Aunque Sánchez se reserve algunos argumentos efectistas para el debate del martes, lo que hasta ahora sabemos del preacuerdo PSOE-C’s es muy similar a lo que hubiera sido un acuerdo que incluyera también al PP, aunque, afortunadamente, mucho menos radical que los veinte folios de banalidades pergeñados por los bacterios de Moncloa. No se sube el IRPF, se prohíbe cualquier referéndum como el de Cataluña, se reforma el CGPJ para asegurar la independencia del Poder Judicial, se suprimen los aforados, se eliminan las diputaciones y se rebaja el número de firmas para la Iniciativa Legislativa Popular, de 500.000 a 250.000.
El PSOE ha cedido más ante Ciudadanos de lo que lo hubiera hecho ante el PP y Rivera ha conseguido que Snchz respalde el programa del PP de 2011, el de las cuatro promesas: bajar los impuestos, combatir el paro, defender la unidad nacional frente al separatismo, y, como dijeron Rajoy y Gallardón en sus discursos de investidura: «acabar con el obsceno espectáculo de que los políticos nombren a los jueces que pueden juzgar a esos políticos». ¿Votará el PP no al PP de 2011? Puede. Pero Rivera se habrá asegurado el rebote para el próximo Gobierno.