Ataque preventivo de ERC a Mas: Gobierno breve o renuncia

LIBERTAD DIGITAL – 18/08/15

· El líder de ERC y el número uno de la lista se resisten a reconocer al «president» como candidato «único» de la lista «unitaria».

El ninguneo de Mas por parte de Raül Romeva y Oriol Junqueras es constante, en cada entrevista, tertulia o intervención ante los medios. La candidatura es de la «sociedad civil», Mas sólo es el número cuatro y no está decidido quién será el candidato a la presidencia de la Generalidad. Este es el discurso que comparten Junqueras y Romeva. Lo importante, dice el primero, son «las estructuras de Estado». El segundo añade que Mas no es «el piloto del proceso».

Entre tanto, prosiguen los guiños de ERC a la versión catalana de Podemos, «Catalunya Sí que es pot», los contactos con dirigentes de la CUP y los preparativos para la manifestación del próximo «Onze de Setembre» del grupo de los «independientes», más próximos a ERC, las CUP e incluso Podemos que a la Convergencia de Mas. Se tantea un escenario postelectoral en el que pueda gobernar Cataluña un tripartito de izquierdas que dejaría fuera a los convergentes a pesar de que comparten lista con ERC. En ese escenario encajarían las dos opciones que han cobrado enteros en los últimos días, Romeva o Junqueras como «president» a cambio de los votos de los podemitas catalanes y de las CUP.

Las diferencias son más acusadas entre CDC y ERC que entre los republicanos y la izquierda antisistema, incluso a la hora de calibrar el resultado, si en escaños, como pretende Mas, o en votos, según apunta la izquierda para dar valor plebiscitario al resultado. «Catalunya Sí es pot» está dividida respecto a la secesión, con un grupo partidario de la declaración unilateral y el «oficial», propicio a que los catalanes ejerzan primero el «derecho a decidir».

Las estrategias de unos y otros son compatibles, lo que ha llevado a Junqueras a mostrar más sintonía con el candidato de Podemos, Lluís Rabell (antes José Luis Franco Rabell) o con Antonio Baños, el de las CUP, que con su compañero de lista, Artur Mas, con quien sólo habla en público o ante testigos, tal es la desconfianza.

«Rectificación» de Romeva

Convergencia no ha reaccionado en público, pero ha movido todos los resortes posibles para que Romeva rectificara sus declaraciones sobre Mas. La presión ha sido de tal magnitud que a última hora de la tarde el número uno de la candidatura separatista «unitaria» se dirigía a las redes sociales con los siguientes mensajes: «Artur Mas siempre ha estado a la altura de las demandas ciudadanas» y «si la mayoría así lo establece habrá un gobierno plural, de concentración, con un mandato claro y tan corto como sea posible, un gobierno presidido por Artur Mas».
 
En caso de que la mayoría no lo avale ni en votos ni en escaños y se tenga que producir una suma de partidos separatistas o proclives se mantienen las opciones de Romeva y Junqueras para pactar con las CUP y los podemitas y establecer una nueva «hoja de ruta» al tiempo que se acabaría con CDC y con Mas.

Si la lista en la que el actual «president» figura de número cuatro consigue la mayoría absoluta, sólo tendría legitimidad para presidir un gobierno breve, abocado a una ratificación de la república catalana. Caso contrario, ERC tendría las manos libres para pactar con «Catalunya Sí es pot» y con las CUP sobre la condición de que Mas no pudiera ser en ningún caso candidato a la reelección.

Los mensajes de Romeva, lejos de aplacar el nerviosismo y enfado en Convergencia ha sulfurado aún más a los partidarios de Artur Mas, que braman contra Junqueras y exigen una rectificación sin paliativos. Ya es la segunda vez que aflora la cuestión del candidato de la lista separatista y Mas no consigue superar las reticencias que provoca su figura y el fantasma de un escenario en el que él sea sacrificado en beneficio de «su» proceso separatista. En ERC, los actuales movimientos se explican como un ataque preventivo contra Mas, que pretende apropiarse del proceso y asegurar su supervivencia política.
 
LIBERTAD DIGITAL – 18/08/15