- El anuncio de una moción de censura en Murcia ha sido contestado por Ayuso con una convocatoria de elecciones que amenaza con mover el eje del centroderecha español.
2. No es una errata: a la del Gobierno. La presidencia de la Comunidad es sólo el penúltimo peldaño para ella (y para Miguel Ángel Rodríguez, el Iván Redondo del centroderecha español).
4. Está por ver, sin embargo, que su victoria sea suficiente frente a la suma de PSOE, Podemos, Más País y lo que quede de Ciudadanos. Hará bien el PP en esmerarse para que así sea. Porque si cae Madrid, caerán Castilla y León y Andalucía, sin duda alguna.
5. Los madrileños acudirán sin embargo a las urnas con una certeza de la que carecían en 2019. Cualquier papeleta, cualquiera, que no lleve el nombre de Ayuso será un voto para el PSOE.
6. Por si la moción de censura en Murcia fuera poca traición, la Mesa de la Asamblea, presidida por Ciudadanos, ha aceptado tramitar las mociones de censura de Más Madrid y Podemos. Y eso a pesar de haber sido disuelta horas antes.
7. La disputa acerca de qué fue primero, el huevo de la disolución o la gallina de las mociones, se solventará en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
8. El debate jurídico parece no tener vuelta de hoja. Si los argumentos de Más País y de PSOE fueran ciertos, bastaría con presentar una moción de censura tras cada convocatoria de elecciones anticipadas, en el plazo de tiempo que tarda en formalizarse esa convocatoria en el boletín oficial, para anular las elecciones.
9. Más País y PSOE parecen confundir además dos conceptos distintos. El del momento en el que se acuerda la disolución de la Asamblea y el del momento en que se formaliza esta. Obviamente, el relevante a efectos jurídicos es el primero.
10. Y por eso el plazo desde el que se empieza a contar para determinar la fecha de las elecciones es el primero y no el segundo. Para comprobarlo, sólo hay que echar un vistazo a la Ley 5/1990, de 17 de mayo, reguladora de la facultad de disolución de la Asamblea de Madrid por el presidente de la Comunidad.
11. Si la tesis anterior es cierta, entonces el presidente de la Mesa, de Ciudadanos, podría tener por delante una posible querella por prevaricación al no haber aceptado la disolución de esta y haber admitido en cambio dos mociones de censura presuntamente irregulares.
12. Lo paradójico es que un partido que vio cómo una Mesa parlamentaria controlada por el nacionalismo retorcía la interpretación de los reglamentos en septiembre de 2017 para puentear la legalidad haya replicado esos mismos trucos de manos… para impedir la convocatoria de unas elecciones en las que sus resultados prometen ser devastadores. Si eso no hace brotar en Ciudadanos algún reparo moral, es que el partido ha asumido ya eso que las redes llaman el PSOE state of mind.
13. Normalizadas las mociones de censura como puerta B de acceso al poder para la izquierda cuando el resultado en las elecciones no le ha sido favorable, ¿quién confiará a partir de ahora la estabilidad de futuros gobiernos de coalición?
14. ¿Y quién garantizará que estos gobiernos no se rompan a las primeras de cambio en función de los intereses coyunturales de turno del socio menor?
15. De momento, la vicepresidenta Carmen Calvo ya ha pedido al PP que «se acostumbre» a las mociones de censura. El PSOE de Pedro Sánchez ha hecho de la excepcionalidad costumbre. Veremos a qué tipo de democracia conduce eso.
16. A una con un mínimo de estabilidad institucional no, eso seguro.
17. Atentos en cualquier caso a los movimientos en el PP si Ayuso consigue de nuevo la presidencia y lo hace con un resultado claro frente a Vox y Ciudadanos.
18. Quienes alabaron hace tres meses la valentía del PSOE al nombrar al ministro de Sanidad candidato a la presidencia de la Generalidad catalana en plena pandemia deberían ahora alabar la de Isabel Díaz Ayuso adelantándose a los movimientos en su contra del PSOE y de Ignacio Aguado.
19. Si algo se ha confirmado hoy es que en España existe un Gobierno, el de PSOE, Podemos, ERC y EH Bildu, y una oposición, la de Isabel Díaz Ayuso. El resto es sólo tramoya.
20. Inés Arrimadas ha calculado mal. Es posible que la líder de Ciudadanos pretendiera poner pie en pared frente a los intentos de absorción del PP arrebatándole a los populares una comunidad menor.
21. Lo que ha hecho en la práctica Arrimadas es practicarle la eutanasia a Ciudadanos y poner en riesgo de extinción al centroderecha. Es decir, trasladar a Madrid el escenario político catalán.
22. «Me arrepiento de haber votado a Ciudadanos» decían ayer docenas de votantes naranjas en las redes sociales. Es un sentimiento con el que resulta fácil empatizar.
23. Resulta difícil saber qué esperaba exactamente Inés Arrimadas que ocurriera después de arrebatarle al PP una comunidad autónoma sin mayor motivo.
24. «Inés ha calculado mal. No se esperaba lo de Madrid». Esto lo dicen fuentes del propio Ciudadanos. Si es cierto, cabe preguntarse quién es más naif. Si el PP murciano al no haber previsto la traición de Ciudadanos o Inés Arrimadas al creer que arrebatarle una comunidad al PP iba a ser aceptado mansamente por los populares.
25. Corre por ahí la teoría de que Inés Arrimadas ha querido desembarazarse de Ignacio Aguado forzando la convocatoria de elecciones en Madrid. La tesis es difícil de comprar. Porque finiquitar a Aguado liquidando al partido es una idea propia del que asó la manteca.
26. «Mira, mira cómo liquido a Ignacio Aguado volando España por los aires». No lo veo razonable. ¿O no era Ciudadanos el partido de la responsabilidad?
27. Corre también el rumor de que se está gestando en Ciudadanos un golpe palaciego contra Arrimadas. La pregunta es… ¿en qué sentido?
28. El pacto de Ciudadanos y el PSOE prevé darle la presidencia de la comunidad a Ana Martínez Vidal y la alcaldía de la ciudad de Murcia al PSOE. Incluye también la alcaldía de varias localidades menores.
29. Es pan para hoy y hambre para mañana. Porque en las siguientes elecciones autonómicas, Ciudadanos será historia. En Murcia y en el resto de España.
30. Arrimadas ha conseguido, eso sí, lo que jamás consiguió Albert Rivera: la presidencia de una comunidad. Lo ha hecho a costa de matar al partido. Pero lo ha conseguido.
31. La excusa para la moción han sido las supuestas vacunaciones irregulares de algunos miembros del gobierno autonómico. Es llamativo que esas vacunaciones irregulares no hayan tumbado ningún gobierno del PSOE allí donde son estos los que ocupan el poder.
32. Es llamativo también que Ciudadanos haya aceptado las mociones de censura de Más País y el PSOE después de señalar que la moción de censura en Murcia era poco más que un caso aislado.
33. El terremoto político tiene su epicentro en Murcia, pero irá mucho más allá. Sus consecuencias serán devastadoras para Ciudadanos y el resultado final será un reordenamiento del centroderecha español y, quizá, un cambio de liderazgos políticos en ese espacio.
34. Más preguntas imposibles de contestar hoy. ¿Qué consecuencias tendrá para Podemos este acercamiento de Ciudadanos al PSOE? ¿Quién será el candidato del PSOE a la presidencia de la Comunidad? ¿Y el de Ciudadanos (no demos por sentado a Aguado)? ¿Corre peligro Castilla y León? ¿Y Andalucía? ¿Qué ocurrirá con un PP divorciado de Ciudadanos y obligado a pactar con Vox para conservar el poder en sus comunidades, es decir, obligado a comerse todo lo proclamado desde la moción de censura de Vox contra Pedro Sánchez?