ABC 24/04/15
Los servicios de Inteligencia e Información centran en Cataluña buena parte de sus esfuerzos en la lucha contra el yihadismo, incluido el acercamiento de sectores radicales de seguidores del islam a los nacionalistas de esa Comunidad. A estos últimos, según fuentes solventes consultadas por ABC, los querrían utilizar para conseguir implantar allí un estado islamista a cambio de apoyar sus tesis soberanistas.
A la vista de los datos, ese especial foco de atención en Cataluña no es una decisión gratuita: entre 1996 y 2013 el 33,3 por ciento de los condenados por delitos relacionados con estas actividades fueron personas detenidas en esa Comunidad –un 28,6 por ciento en la provincia de Barcelona–, y tres de cada diez tenían su residencia allí. Pero
es que además esos porcentajes crecen de forma significativa entre 2004 y 2013, pues esos índices aumentan al 37,5 y el 35,7 respectivamente, según datos recogidos por los investigadores del Real Instituto Elcano Fernando Reinares y Carola García-Calvo.
Los dos investigadores recuerdan además que Barcelona era la ciudad elegida por una célula desmantelada en 2008 para perpetrar un atentado con explosivos previsiblemente suicida en el Metro, lo que habría supuesto un nuevo 11-M en España. En esa operación fueron detenidos diez paquistaníes –siete de ellos residentes en la Ciudad Condal y uno nacionalizado español–, así como un ciudadano indio. Todos fueron condenados.
Durante la investigación se detectaron conexiones directas entre esta célula con Therik e Taliban Pakistan (TTP) una de las principales organizaciones asociadas con Al Qaeda. Miembros cualificados de este grupo recibían además fondos de otra célula desmantelada en Cataluña en septiembre de 2004.
Los datos desde 2013, cuando las operaciones contra el yihadismo se centran en células relacionadas contra organizaciones establecidas en Siria e Irak, son aún más contundentes y demuestran que Cataluña es la Comunidad en la que hay más riesgo de que se produzca un ataque.
En ese tiempo, el 35,3 por ciento de los implicados han sido detenidos en Cataluña, donde además residía el 39,5 de ellos. Y hasta el 31,8 y el 36 por ciento del total, respectivamente, en la provincia de Barcelona. Para los investigadores citados es muy destacable, además, que los procesos de radicalización han comenzado a afectar, en el caso catalán, a sectores sociales ajenos en principio a comunidades musulmanas, con una llamativa aparición de conversos yihadistas.
Mientras, ayer el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, reveló en la Reunión de Directores y Responsables de Centros de Coordinación contra el Terrorismo –que se celebra en Madrid– que en España se han desarrollado desde 2004 un total de 122 operaciones contra el terrorismo internacional, con un total de 566 detenidos. «Gracias a la excelente labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad –dijo–, las detenciones han aumentado, de forma que, en los cuatro primeros meses de 2015, se ha detenido a 42 terroristas. Sabemos, además, que 115 yihadistas se han desplazado desde España a zonas de conflicto y que 14 han regresado, de los cuales nueve están en prisión y cinco en libertad».