LA RAZÓN, 2/4/12
La izquierda abertzale buzonea misivas entre los dirigentes populares en el País Vasco para que apoyen el «proceso» de fin de ETA. Una de ellas va firmada por Rufino Echeverría.
MADRID- Dirigentes del Partido Popular del País Vasco han recibido, en los casilleros de sus domicilios, cartas de la llamada «izquierda abertzale» (Batasuna), en las que se les propone la apertura de negociaciones secretas para alcanzar un «escenario definitivo de paz y soluciones democráticas». Las misivas no tienen ningún membrete, están escritas a máquina y, al menos una de ellas, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, va supuestamente firmada por el dirigente «batasuno» Rufino Echeverría.
Aunque el tono parece amistoso, casi seráfico, expertos antiterroristas llaman la atención sobre el hecho de que las cartas hayan sido remitidas a los domicilios, y no a la sede oficial, como parecería lógico.
«Insoportable»
Su llegada ha coincidido, además, con una serie de declaraciones y artículos de cabecillas de la «izquierda abertzale», en las que animaba a hacer «insoportable» la vida al Partido Popular del País Vasco. Al menos hasta que acepte seguir con el «proceso» que, durante la anterior legislatura, pactaron socialistas y nacionalistas con ETA y su entramado.
Asimismo, coincidieron en el tiempo con la visita que empresarios, y otras personas que pretendían hacer de «intermediarios», realizaron a los citados dirigentes populares, para pedirles, precisamente, lo que decían las cartas, a las que, por lo tanto, al margen de rúbricas y membretes, se les da la máxima fiabilidad
Fuentes populares, consultadas por este periódico, han subrayado su negativa rotunda a entablar cualquier tipo de contacto con la «izquierda abertzale». Reiteraron que ninguna reunión es posible hasta que condenen a ETA, renuncien al terrorismo, asuman su culpa, y respeten la Constitución y el Estatuto de Autonomía.
En la una de las cartas, la que, supuestamente, está firmada por Rufino Echeverría, se dice que «la evolución de la situación política en Euskal Herria necesita de espacios progresivos de diálogo entre las distintas fuerzas políticas».
Relaciones bilaterales
«La Izquierda Abertzale,–agregaba– en sintonía a sus compromisos por un escenario definitivo de paz y soluciones democráticas, entiende imprescindible abordar un espacio de relaciones bilaterales con el Partido Popular Vasco en aras a avanzar en ese objetivo. Un ámbito de relaciones totalmente discreto y, por tanto, al margen de cualquier interés o utilización que coarte la confianza entre ambas partes. En espera de una disposición positiva a esta reflexión y planteamiento, atentamente».
La «izquierda abertzale» (Batasuna), brazo político de ETA, actúa, como ha hecho siempre a lo largo de su siniestra historia, con una «lógica» aplastante. Los cabecillas han interiorizado, por utilizar un verbo que tanto gusta a la banda, que el Partido Popular no va a seguir el «proceso» que, a través de intermediarios, pactaron con nacionalistas y socialistas en la pasada legislatura.
Un PP sin mayoría
El objetivo era evitar la victoria del Partido Popular en las elecciones y, si lo conseguía, que no fuera por mayoría absoluta. Al no haber alcanzado esta meta, han tenido que cambiar de estrategia y, de momento, se han planteado la presión sobre los populares para que el «proceso» avance en el sentido que ellos quieren. Las misivas forman parte de esa presión, pero hay más.
En unas declaraciones realizadas a «Gara» el pasado día 4, el cabecilla «batasuno» Pernando Barrena lo explicaba con toda claridad: «lo que ahora parece inamovible, se moverá. Lograremos mover ese elefante (al Gobierno del PP). Nuestro reto es que las posiciones inmovilistas sean política y socialmente insoportables. Y creo que el PP ya empieza a acusar recibo de esa insoportabilidad, al menos en Euskal Herria». Barrena admitía que en el mundo de ETA existe una «lógica ansiedad que nos produce querer dar solución a situaciones humanas tan precarias como la del Colectivo de Presos».
Al no haberse producido los pasos pactados en su día con nacionalistas y socialistas, los reclusos se han convertido en un problema. Se les habían creado una serie de expectativas, que incluían, no solo su traslado a cárceles del País Vasco y Navarra, sino su puesta en libertad.
Provocar
Dos días después de la citada entrevista, Mikel Echeverría, que firmaba como militante de la «Izquierda Abertzale», publicaba un artículo de opinión en el mismo diario. Explicaba que «el primer objetivo en cualquier confrontación, sea del orden que sea, es siempre provocar incomodidad al adversario y colocarlo en situación de desventaja. Esto es precisamente lo que ha conseguido la izquierda abertzale con su cambio estratégico, de tal manera que ahora es el Estado el que no se encuentra cómodo al haber perdido su posición de ventaja política».
«Meollo político»
«El PP es perfectamente consciente de que tras esa fase que veníamos en llamar de “normalización democrática y paz” vendrá el meollo político de la cuestión; esto es, el derecho a decidir y la unidad territorial (anexión de Navarra). Estamos en un proceso de resolución integral; ellos lo saben y para nada lo olvidan. No lo olvidemos nosotros». El autor del artículo negaba que el PP retrasara la toma de decisiones (las que les favorecen) con el fin de «coger aire» y «luego colaborar»: «esto es tan iluso como pensar que también van a solucionar el paro. Pero, ¿podemos esperar del PP un salto involutivo? Podría ser, aunque es de suponer que serán conscientes de que sería como sentar en el garrote vil a su partido en Euskal Herria, una inmolación con banda y música de Madrid».
«Por tanto, –aconsejaba– debemos ser particularmente astutos para no ir a las arenas movedizas a las que quieren dirigirnos para sacar ventaja y frustrar el proceso hundiéndolo en la nada. Eso se consigue sosteniendo la iniciativa política y nutriendo sin descanso el proceso, (…) y provocándole al PP un escenario suficientemente incómodo como para que no les quede más remedio que subirse al tren o quedarse tirado en el andén de la historia».
¿Semana de pasión o de gloria para Arnaldo Otegi?
El ex portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, afronta una semana que puede ser decisiva para su futuro más inmediato, tanto personal como político. De hecho, el diario «Gara» ya le proclamó candidato a lendakari el mismo día que el Tribunal Supremo veía el recurso contra su condena a diez años de cárcel que le impuso la Audiencia Nacional por intentar reflotar Batasuna siguiendo las instrucciones de ETA, a través del proceso conocido como «Bateragune». Otegi, en prisión por esta causa, desde octubre de 2009, puede conocer esta misma semana la resolución del Supremo, quien comenzó a deliberar el pasado miércoles, al finalizar la vista contra la mencionada condena. SI se estima el recurso, bien totalmente o que suponga una rebaja sustancial de la pena, saldrá de prisión, ya que por la otra causa que tiene pendiente se encuentra en libertad bajo fianza, informa F. V.
LA RAZÓN, 2/4/12