Carlos García, LA RAZÓN, 3/4/12
La presión abertzale contra el PP… Las reacciones
– ¿Cómo han sido los 333 días de Bildu en las instituciones?
–Desde luego han sido 333 días malos para la democracia en España, malos para las instituciones vascas y malos para los ciudadanos. Malos para la democracia ya que han demostrado que no la respetan ni en lo más básico, y en los pocos lugares donde han perdido el poder, así lo han demostrado, como en Elorrio entre otros, empleando todo tipo de medios antidemocráticos, contra los resultados de las urnas. Nuestro Tribunal Supremo decretase que Bildu era la sucesión de Batasuna y por lo tanto los testaferros de ETA, a pesar de la sentencia del TC que les legalizó, se están confirmado algunos de los peores augurios.
– ¿Cómo se vive la presencia de la Izquierda Abertzale en las instituciones?
–Para las instituciones vascas supone una situación insostenible e indigna que en su seno estén como cargos públicos, incluso como gobernantes en algunas de las principales instituciones, como en la Diputación de Guipúzcoa y en el Ayuntamiento de San Sebastián, personas y organizaciones que no condenan ni uno sólo de los atentados y asesinatos de la organización terrorista ETA, y que por el contrario defienden públicamente y respaldan, incluso económicamente, a los asesinos, en especial a los presos de ETA que se mantienen fieles a la disciplina de la banda.
– ¿Quiénes salen perjudicados con la presencia de Bildu?
– Los principales perjudicados por la presencia de Bildu en la democracia Española, en las instituciones vascas son los ciudadanos, los ciudadanos demócratas que ven cómo desde sus ayuntamientos los violentos, y quienes están con ETA, tienen todo el apoyo del mundo. Desde los concejales de Bildu, como es el caso de las fiestas de los pueblos y barrios del País Vasco, especialmente el ejemplo de Bilbao, donde quienes exhibían fotos de terroristas y recaudaban fondos para sus fines con la excusa de las fiestas de la Semana Grande han encontrado en el grupo municipal de Bildu el mayor de sus defensores y adalides, y como en Bilbao, en todas las localidades de nuestra comunidad. Pero sobre todo, los ciudadanos que peor parados, desde luego moralmente, han salido, son las víctimas del terrorismo, que no han encontrado en Bildu, ni en ninguno de sus cargos públicos, el más mínimo gesto de reconocimiento, de arrepentimiento o de piedad hacia ellos.
– ¿Está Bildu mostrando su verdadero rostro?
–Desde luego que no. Ya no se molestan en disimular. Todo el mundo en el País Vasco sabe perfectamente qué es Bildu, y nadie niega que representa al mundo de ETA en las instituciones, que están perfectamente coordinados, que buscan los mismos fines y componen partes de una misma estrategia, lo que supone una clara humillación para las víctimas, para quienes durante años han soportado la amenaza terrorista y para quienes han tenido que abandonar esta tierra. Supone que el miedo no se ha extirpado de la sociedad vasca, ya que ni han entregado las armas, ni se ha disuelto la organización y en cambio disponen de miles de millones que gestionan en las instituciones. No sólo eso, sino que además tienen más de 1.000 cargos públicos y todos los medios de las instituciones al servicio de unos fines comunes con ETA, y sobre todo les supone un trampolín fundamental e importantísimo para su inminente asalto al Parlamento Vasco.
– ¿Cómo será el futuro de la coalición abertzale?
–Espero y deseo que se den dos reacciones a modo de filtros que impidan a Bildu-Amaiur-Sortu conseguir uno más de sus objetivos; que el Estado de Derecho impida su presencia en las elecciones autonómicas, y otra que los partidos democráticos, se unan contra estos partidos no demócratas.
Carlos García, LA RAZÓN, 3/4/12