ABC 21/10/16
· Su rechazo a que se hable de «terrorismo» frustró una declaración del Pleno
Bildu, con solo dos diputados de los 350 que forman el Congreso, impidió ayer que los partidos democráticos se unieran para aprobar una declaración institucional de la Cámara Baja sobre ETA. El pronunciamiento unánime iba a coincidir con el quinto aniversario del cese definitivo del terrorismo. Pero el intento de unidad política ante la mayor lacra que ha padecido nuestra democracia fue en vano. Los herederos de Batasuna, representada en las Cortes por Marian Beitialarrangoitia –la exalcaldesa de Hernani que mandó un «abrazo caluroso» a los dos etarras que atentaron en la T-4 de Barajas y provocaron dos muertes– reclamaron que se sacara del texto la mención del «terrorismo» y que se hablara de «víctimas» en general, diluyendo así la responsabilidad de ETA.
Fueron los socialistas, que acostumbran a arrogarse el mérito del fin de la violencia por haber coincidido el comunicado de 2011 bajo el Gobierno de Zapatero y de Patxi López en el País Vasco, los que impulsaron la iniciativa. Eduardo Madina, víctima de un atentado etarra, lideró las negociaciones con su portavoz, Antonio Hernando. Este se empleó a fondo con el jefe de filas del grupo popular, Rafael Hernando, y el diputado vasco Leopoldo Barreda, así como con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, que hizo de intermediario de Bildu. Pese al esfuerzo, no se consensuó un redactado común.
Disolución «incondicional»
La primera versión del texto plasmaba la «satisfacción» del Congreso «por un presente de convivencia» y su homenaje a «todas las víctimas del terrorismo». Además, se recogía la necesidad de que «ETA culmine su disolución». El PP denunció que el redactado era «insuficiente» porque no recogía la «victoria de los demócratas y del Estado de Derecho», obviaba la consideración de «banda terrorista» y omitía que la disolución de la banda debe ser «incondicional».
Esto motivó que tanto Pablo Iglesias como Madina culparan luego al PP de haber sido tan responsable como Bildu de no llegar a un acuerdo. «Los demócratas no podemos hacer cesiones y rebajar las exigencias a ese mundo», replicaron fuentes populares. El portavoz de C’s, Juan Carlos Girauta, lamentó que, cinco años después de que ETA anunciara el cese de la violencia, Bildu no haya sido «capaz» de pactar una declaración para conmemorarlo.