JORGE SÁINZ-Vozpópuli

El Alto Representante, Josep Borrell, lidera el discurso duro de la UE en contra de la invasión rusa de Ucrania y se convierte en el único gran interlocutor español con Estados Unidos y los países aliados

Josep Borrell se ha desmarcado de la tibieza de Pedro Sánchez, y lidera el discurso más duro de la Unión Europea contra Rusia por la invasión de Ucrania. El Alto Representante de la Política Exterior ha ganado «muchos puntos» durante el conflicto, según informan diversas fuentes a Vozpópuli. Y es el único «referente de España» que tiene interlocución directa y constante con Estados Unidos y los países aliados tras dejar Joe Biden a Sánchez fuera de sus contactos habituales con dirigentes europeos.

Borrell ha sido protagonista del pleno extraordinario celebrado por el Parlamento europeo para analizar la invasión rusa de Ucrania. El Alto Representante ha sido contundente en unas palabras con mucha resonancia a nivel mundial. «No vamos a abandonar la defensa de nuestros derechos humanos y libertad porque seamos más o menos dependientes de Rusia», ha dicho Borrell. «Y Nos acordaremos de quienes no estén a nuestro lado».

La contundencia de Borrell contrasta con la tibieza que exhibió Sánchez en RTVE, que se negó a seguir la estela de otros presidentes europeos en el envío de armamento ofensivo a Kiev. Su intervención en la Eurocámara ha investido a Borrell como una de las voces autorizadas de la Comisión Europea en la respuesta a Rusia y Vladmir Putin por el ataque a Ucrania.

Borrell, curtido en la guerra fría

«Borrell es un político de los 80, curtido en la guerra fría y ha demostrado que era la voz que necesitaba Europa en este momento», dicen fuentes diplomáticas a este diario. «Llevaba un año clamando para que Bruselas aprenda a hablar un lenguaje de poder duro. Y desde luego lo ha conseguido».

El protagonismo internacional de Borrell, que además ha puesto voz a las sanciones aprobadas contra Rusia, ha crecido a medida que decrece el de Sánchez. El presidente del Gobierno se ha quedado fuera de las reuniones que convoca regularmente Biden con otros líderes europeos y mundiales. Y España, que empezó muy fuerte en su respaldo a Washington en esta crisis, ha reculado hasta permanecer en un segundo plano en la guerra que se libra en el frontera Este de Europa.

Otras fuentes creen que Borrell no solo sobresale en esta crisis por su experiencia, sino porque «está haciendo equipo por primera vez desde que asumió el cargo». «Ya no va por libre», dicen fuentes europeas a este diario. «Ahora tantea el agua con los máximos responsables de la Comisión y el Consejo antes de lanzarse».

Borrell, de 74 años, no ha tenido una adaptación fácil al cargo de Alto Representante de la Política Exterior Europea. Los debates sobre el 5G, el terrorismo islamista o el empuje de China son una agenda que le cuesta más que Rusia. Sin embargo, la clave, dicen estas fuentes, es que ahora va de la mano de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen; y el del Consejo, Charles Michel.

Los errores de Borrell

El dirigente socialista se ha enfrentado a varias críticas durante su mandato. Hace poco más de un año, Borrell fue muy criticado por un viaje que realizó a Moscú. La visita fue humillante para Europa. Rusia expulsó a diplomáticos de Polonia, Alemania y Suecia el mismo día de la llegada de Borrell a la capital rusa. Y el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, sacó en rueda de prensa el encarcelamiento de los líderes del proceso separatista catalán cuando Borrell pidió la la liberación del opositor Alexei Navalni.

La misión electoral que la UE envió a Venezuela también le costó un aluvión de críticas por parte de varios grupos del Parlamento europeo. «Cuando Borrell juega en equipo y no va por libre, las cosas le van mucho mejor a la Comisión», explica un eurodiputado. «Y ahora lo está haciendo muy bien».

El discurso le ha permitido también enterrar un inicio titubeante de su gestión de la crisis. Borrell fue muy criticado por citar la expulsión de Rusia del festival de Eurovisión casi como un éxito diplomático.