«Cada vez que la democracia aprieta a Batasuna, el PNV sale en su auxilio»

ABC 13/01/14
ENTREVISTA ARANTZA QUIROGA

Los populares denuncian que Urkullu prioriza la defensa de los presos de ETA y coquetea con reabrir los bloques enfrentados de Lizarra

El PP vasco lamentó ayer que el PNV haya «legitimado en parte el terrorismo» al marchar del brazo de Sortu en Bilbao. Su líder, Arantza Quiroga, confía en que el lendakari, Íñigo Urkullu, dé marcha atrás en su «grave error» de salir en defensa de los presos de ETA y retorne al pacto alcanzado en 2012 entre PNV, PSE y PP de «exigencia democrática» a Batasuna.

P- ¿Teme que la foto de la comunión entre el PNV y Sortu en Bilbao sea la reedición del Pacto de Lizarra?
R- Sorprende la rapidez con la que el PNV ha cambiado de postura. Después del comunicado del EPPK pidió tranquilidad y en dos días ha pasado a manifestarse del brazo de Sortu reclamando derechos de los presos. Lo que realmente buscaban (con la marcha) son medidas de gracia. La Constitución ya reconoce sus derechos.

P- El acto «silencioso» derivó en un grito unánime por la amnistía. ¿Cree que el PNV fue manipulado o acudió a sabiendas de lo que se encontraría?
R- Fue con plena consciencia. No es nuevo. Cada vez que se produce una mayoría de los tres partidos (habla de PNV, PSE y PP) obligando a Batasuna a dar pasos, al PNV le entra vértigo y tiene que salirse de ahí para ir a su encuentro. Lo vimos con el «espíritu de Ermua», y se fue a Lizarra.

P- PP y PSE vienen de facilitar las cuentas a Urkullu con un gran pacto de estabilidad. ¿Se replantean su apoyo al PNV tras su giro radical?
R- Ayer vimos una confluencia clara de intereses con Bildu. Veremos si esto es solo una táctica momentánea u obedece a iniciar el camino por la construcción nacional. No sabemos.

P- Además de amnistía, se reclamó independencia. ¿El acto de Bilbao fue el ensayo del PNV y Sortu por una marea soberanista al estilo catalán?
R- La convocatoria era por los presos, pero cuando digo que hay confluencia de intereses, y ayer se vio, es porque todos sabemos su intento por sacar rentabilidad política.

P- ¿Usted también ve un órdago de Urkullu a Rajoy con la protesta?
R- Sí. Y es lo más inquietante. Es un grave error que la presión del Gobierno vasco no vaya hacia esos que tanto daño han hecho, sino al Gobierno de España, que lo que hace es aplicar y garantizar el Estado de Derecho. Así se construye una democracia a la altura y necesidades de Batasuna. Pero no será plena, porque el de ETA es un proyecto totalitario y no se garantizan nuestras libertades. Me preocupa que el lendakari Urkullu priorice los derechos de los presos en lugar de liderar la unión de los demócratas.

P- ¿Por qué dijo que lo del sábado le «pasará factura al PNV y vascos»?
R- Porque tensiona y divide a la sociedad entre nacionalistas y no nacionalistas. La actitud del PNV es reabrir los bloque separados, como en Lizarra. Sabemos a lo que nos lleva.

P- ¿Debe el Gobierno atender a la multitud proetarra reunida el sábado?
R- El Gobierno, como ya ha dicho, aplicará la política antiterrorista en la medida en que ETA no desaparezca y quiera seguir influyendo. Lo vemos con la última detención. Es verdad que vivimos un antes y después desde la decisión dejar matar. Pero debemos ser más exigentes. Tras años de sufrimiento, no es suficiente que ETA deje de matar. Nos tenemos que seguir rebelando, como cuando asesinaba, ante esos comportamientos totalitarios.

P-Se habla de una reunión Rajo y Urkullu a final de mes. ¿Lo aplaude?
R- Creo que es bueno que haya relación de normalidad y fluida entre los presidentes. Lo que me decepciona es que en lugar de buscar las sinergias para que Euskadi sea motor en la salida de la crisis en España, la prioridad del lendakari sean los presos.

P- ¿Cómo explica que 100.000 personas apoyen en la calle a los presos?
R- Existe una clara utilización del ansia de los vascos por querer la paz, acabar con todo. Con esa buena intención hay muchos que salen a manifestarse. Si ven al lendakari o al PNV avalando que hay conculcación de los derechos de los presos y hay un inmovilismo desde el Gobierno de España, el mensaje termina calando.

P- ¿Qué le sugirió la foto de Durango?
R- Al ver esas caras a todos se nos revuelve el estómago. Han cometido asesinatos, no se arrepienten y se creen salvadores de la patria, gudaris. Quieren escenificar una victoria, pero en el fondo solo se ve su fracaso vital. No han logrado ninguno de sus objetivos políticos. Solo dolor y tragedia.

P-¿Cómo valora la disparidad de criterio en los jueces de la Audiencia?
R- Nos gusten más o menos, les debemos un respeto absoluto. No es bueno polemizar. Si no, abonaremos la teoría de Batasuna de que el poder judicial obedece a criterios políticos.