EL CORREO – 09/02/15
· La familia del policía local asesinado por ETA coloca un buzón para que quienes apoyaron el atentado hagan autocrítica.
· Allegados y políticos recuerdan en Andoain a Joseba Pagazaurtundua cuando se cumplen doce años desde que la banda la arrebatara la vida.
La familia de Joseba Pagazaurtundua volvió a honrar su memoria como cada aniversario, y van doce, desde que ETA acabara con su vida. Pero el de ayer fue un acto diferente. Más allá de los discursos, que también los hubo, los allegados del que fuera sargento de la Policía Municipal de Andoain dieron un paso más. Tienen claro que no cerrarán «el duelo sin verdad y sin reparación». Por ello, colocaron un buzón en la plaza del Ayuntamiento del municipio guipuzcoano para que quienes de alguna manera participaron en su asesinato o lo jalearon reconozcan, a través de cartas anónimas o no, el daño causado.
Es la primera vez que los allegados de una víctima de ETA llevan a cabo una iniciativa de estas características
Encabezados por la viuda de Joseba, Estíbaliz Garmendia, y la hermana de éste, Maite Pagazauntundua, el homenaje contó con la presencia, entre otros, de la presidenta de UPyD –partido por el que es europarlamentaria la propia Maite–, Rosa Díez; el diputado vasco de esta formación, Gorka Maneiro; Juan Carlos Cano y Ramón Gómez, en representación del PP de Gipuzkoa; el exparlamentario socialista Ignacio Latierro; el filósofo Fernando Savater y la hermana de Gregorio Ordóñez y presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo de Euskadi, Consuelo Ordóñez.
Durante su intervención, Maite Pagazaurtundua recalcó que su familia no ha obtenido aún «la reparación debida; que no es judicial, sino política, social y humana». La Audiencia Nacional condenó en 2011 a 32 años de prisión a Gurutz Agirresarobe como autor del atentado. ‘Pagaza’, como le conocían en su círculo cercano, recibió tres disparos mientras desayunaba un café en el bar Daytona de Andoain. Con la vista puesta en un futuro con «dignidad y sin maquillajes», los allegados de la víctima optaron este año, en base a un gesto cuanto menos simbólico, favorecer, o al menos intentarlo, un ejercicio de autocrítica. Ese es, a grandes rasgos, el objetivo que persigue el buzón que ayer colocaron en uno de los árboles que cobijan la escultura de Agustín Ibarrola en memoria de Joseba. «Que todo aquel que lo desee pueda construir esa reparación mediante la asunción de su particular responsabilidad en el asesinato de Joseba y del resto de víctimas del terrorismo, expresando la memoria del mal del que se liberan», explicó su hermana.
La familia no ha solicitado permiso alguno al Ayuntamiento de Andoain para instalar el buzón. Ahora bien, según aseguró Maite Pagazaurtundua, su intención es la de hacer llegar un escrito a la alcaldesa del municipio, Ane Karrere, de Bildu, para pedirle «encarecidamente que no lo retire». Cabe recordar que semanas atrás, Covite colocó sin autorización varias placas en diferentes municipios vascos –entre ellos, Bilbao, San Sebastián o Rentería– en memoria de algunas de las personas a las que ETA arrebató la vida. En todos los casos se quitaron poco después.
«Ni una sola crítica»
En la misiva que registrarán en el Consistorio de Andoain, los allegados de la víctima, hacen hincapié en que el de Pagazaurtundua fue «un crimen muy local», especialmente vinculado a la localidad. Lamentan en este sentido que en doce años «ninguno de los vecinos» que en su día apoyaron o callaron ante el asesinato haya hecho llegar a la familia «una sola crítica sobre su responsabilidad difusa o directa». «Quienes pasaron los datos para matarlo, quienes atentaron con cócteles molotov contra la vivienda familiar, donde vivían dos niños pequeños…». Y es que, según subrayó ayer el filósofo Fernando Savater, ‘Pagaza’ no murió por «una riña en un bar o por una casualidad», sino por unas ideas políticas.
Además del buzón, se ha habilitado una página web (www.elbuzondejoseba.com) para que quien así lo desee pueda hacer llegar, de manera virtual, el mismo mensaje a los allegados de la víctima y recoger, en cierto modo, la «memoria cotidiana sobre el terrorismo». Ya han recibido aportaciones de, entre otros, el escritor Mario Vargas Llosa.
En el homenaje celebrado ayer en Andoain tomaron también la palabra el exparlamentario socialista Ignacio Latierro, quien, sin pretender comparar el yihadismo radical con ETA, sí consideró que existe entre ambos «una raíz común: el fanatismo». «Unos asesinan por Dios y otros lo hacían por la patria». «Algo –añadió–, que en ningún caso está justificado». Consuelo Ordóñez, amiga de Maite Pagazaurtundua, también quiso dedicar unas palabras de aliento a la familia del que fuera policía municipal de Andoain, pero también a él mismo. Así, afirmó, y lo hizo con su habitual contundencia, que se encargarán de mantener viva su memoria y de recordar «su último grito» hasta que se les «quiebre la voz».
EL CORREO – 09/02/15