ABC 08/11/13
· La discrepancia entre ambos socios se une al retraso de la consulta hasta octubre de 2014.
A punto de cumplirse el plazo que CiU y ERC se han dado para señalar fecha y pregunta de la consulta independentista, los cambios de ritmo de los nacionalistas se acentúan, de modo que el presidente Artur Mas dice un día que ese referéndum se hará con o sin permiso del Gobierno de España, para luego precisar que esa convocatoria tiene que ser legal. Pero ayer, el Parlamento catalán fue escenario por primera vez del distanciamiento entre ambas formaciones en materia soberanista.
Ocurrió durante la votación de una moción de la Candidatura de Unidad Popular (CUP) en la que se proponía «convocar el referéndum de forma unilateral, habilitando todos los mecanismos al alcance para hacerlo posible; en el caso de que se constate el bloqueo por parte del Estado español». Los republicanos, con los que Artur Mas mantiene un acuerdo de legislatura gracias al cual aprobará los Presupuestos de la Generalitat de 2014, votaron a favor del escrito de la CUP, que también apoyó ICV. Por su parte, CiU votó en contra por entender que no es el momento para hacer esta propuesta ya que haría un «mal favor al proceso político», según alegó el diputado David Bonvehí. El PSC también votó en contra, al igual que PP y Ciudadanos.
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, intentó restarle importancia a la controversia. «No pasa absolutamente nada», dijo. Pero lo cierto es que, en apenas 24 horas, los nacionalistas han tomado decisiones que distan mucho de los objetivos marcados por la formación independentista. La vicepresidenta del Gobierno catalán, Joana Ortega, explicó el miércoles que la consulta no podrá hacerse antes de octubre de 2014 debido a la imposibilidad de disponer de un censo electoral y de la aplicación del voto telemático antes de esa fecha. El presidente de ERC, Oriol Junqueras, confesó que desea la celebración del referéndum «cuanto antes mejor».
Moderación… a ratos
Asimismo, la resistencia de CiU a plantear una pregunta cerrada como quieren los republicanos —que permita a los catalanes contestar «sí» o «no» a la independencia— también contribuye a evidenciar ese alejamiento, así como las dificultades que ambas formaciones están teniendo para llegar a un acuerdo en este sentido. Los nacionalistas preferirían un enunciado más ambiguo relativo a un «Estado propio» o un «Estado soberano».
Alejamiento propiciado en parte por la moderación que Mas parece haber ordenado a sus compañeros de filas, aunque él mismo se lo salte de vez en cuando. Sin ir más lejos, el miércoles, y también en sede parlamentaria, donde aseguró que la consulta se hará aunque el Estado no quiera, pues para eso está a punto de aprobarse una ley catalana de consultas populares. No obstante, el principal enlace entre el Gobierno catalán y ERC, el consejero de Presidencia Francesc Homs, aseguraba ayer que la fecha de una eventual consulta soberanista se decidirá durante el próximo mes de diciembre y se tratará que sea de forma consensuada con todos los grupos parlamentarios favorables al «derecho a decidir».
«Todas las aportaciones que pueda haber se tendrán en cuenta, pero al final esto requiere de un acuerdo de los grupos políticos, del Parlamento y del Gobierno catalán, y hasta diciembre no habrá novedades», dijo.
Cobra peso la creencia de que, finalmente, el presidente Mas no convocará la consulta sobre la autodeterminación. La presidenta del PP catalán, Alícia Sánchez-Camacho, cree que la Generalitat «tiene cada día más claro que no se hará una consulta. Ortega da largas a ERC porque sabe que no puede hacer una consulta que es ilegal» y, por ello, «está utilizando a ERC solo para aprobar los Presupuestos y así ganar tiempo».
Por su parte, el presidente de Ciutadans, Albert Rivera, aseguró que «el principal enemigo de Cataluña es el separatismo». Acusó a quienes defienden la ruptura con España de «sacar credibilidad a la autonomía catalana» y de «cargársela» y avisó de que «tal como dice la resolución 1.541 de la ONU, no existe el derecho de autodeterminación de un territorio que forma parte de un país democrático».
ABC 08/11/13